En la oscura madrugada de hoy, la Ruta Nacional 9/34 se convirtió en el escenario de un choque devastador entre un colectivo de la empresa Andesmar y un camión, dejando tres personas sin vida y otras quince heridas. Leonel, uno de los sobrevivientes, relata con estremecedora angustia los momentos de terror que vivieron los pasajeros.
inicia sesión o regístrate.
En la oscura madrugada de hoy, la Ruta Nacional 9/34 se convirtió en el escenario de un choque devastador entre un colectivo de la empresa Andesmar y un camión, dejando tres personas sin vida y otras quince heridas. Leonel, uno de los sobrevivientes, relata con estremecedora angustia los momentos de terror que vivieron los pasajeros.
"Venía desde La Rioja hacia Jujuy-La Quiaca. El colectivo salió con demora, sentí que íbamos a una velocidad fuerte. Nuestro horario era llegar a la 1:30, y por la demora estábamos a cuatro o cinco horas de La Quiaca", comenzó Leonel, visiblemente afectado por la tragedia que presenció.
En un relato lleno de detalles, describió cómo se convirtió en el primer testigo del siniestro. "Fui la primera persona que logró salir del micro a pedir auxilio a los vehículos que pasaban porque no se veía al colectivo que quedó cruzado en medio de la ruta".
El informe inicial sugiere que el conductor del camión se quedó dormido, desencadenando la colisión. "Fue muy traumático, los gritos de la gente atrapada", compartió Leonel, con la voz entrecortada.
"Fue un momento que pareció una película, el impacto, los gritos. Estoy mal, me siento mal porque viajaba una pareja de abuelitos que venían de Mendoza y son oriundos de Bolivia. Iban de vacaciones, les había pedido que me ayuden porque no conocía. Es la primera vez que viajo solo", lamentó.
Con gratitud por su reacción rápida, Leonel expresó: "Gracias a Dios por la reacción pude prevenir que los vehículos no impactaran contra el colectivo porque no se veía".
El destino final de Leonel era Lima, buscando un futuro mejor. "Estamos pasando mal, y lamentablemente me doy con esta escena", añadió con pesar.
En medio del caos, Leonel se convirtió en un héroe improvisado al colaborar en solicitar ayuda. "Pude colaborar en hacer que la gente pare y llamara a emergencia, esa fue mi colaboración con la gente".
Lamentablemente, relató escenas desgarradoras: "Vi chicas y caballeros totalmente desfigurados con el rostro quebrado, horrible".
Al final de su relato, Leonel hizo un llamado a las autoridades: "Me parece prudente recalcar a las autoridades que le prohíban a los camiones conducir de noche porque pueden afectar a las familias".