La emoción de Steven Bayer, jefe del equipo de emergencia alemán, es indescriptible. Los rescatistas germanos lograron sacar ayer con vida a una mujer de entre los escombros de un edificio derrumbado en Turquía, provocando la ovación de los presentes, unas 104 horas después de que quedara sepultada por el sismo que sembró de muerte y la destrucción en toda la región.
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La emoción de Steven Bayer, jefe del equipo de emergencia alemán, es indescriptible. Los rescatistas germanos lograron sacar ayer con vida a una mujer de entre los escombros de un edificio derrumbado en Turquía, provocando la ovación de los presentes, unas 104 horas después de que quedara sepultada por el sismo que sembró de muerte y la destrucción en toda la región.
"Ahora creo en los milagros", dijo Bayer.
En la ciudad de Kirikhan, los brigadistas alemanes levantaron con cuidado a Zeynep Kahraman, de 40 años, en una camilla y la trasladaron a una ambulancia.
"Puedes ver a la gente llorando y abrazándose. Es un gran alivio que esta mujer, en esas condiciones, haya salido tan bien. Es un auténtico milagro", afirmó Bayer
El caso Zeynep Kahraman no es el único, los rescatistas lograron salvar ayer a otras cuatro personas de los escombros, cinco días después del terremoto.
Entre ellos están una madre y su hijo, que fueron rescatados con vida en Diyarbakir, más de 100 horas después de que la casa se derrumbara por el seísmo.
Los equipos de búsqueda y rescate alcanzaron a Sebahat Varli, madre de 32 años, y a su hijo Serhat, de 10. Antes de sacarlos de los escombros los socorristas tuvieron que hacer unas primeras intervenciones médicas para luego enviarlos a un hospital cercano.
Unas horas antes los equipos de rescate habían logrado sacar con vida a otras dos personas, una en la región de Kahramanmaras y otra en Hatay, en el extremo sur del país.
Allí una mujer de 26 años, de nacionalidad siria, fue rescatada de una casa de tres pisos derrumbada.
El otro "milagro" tuvo lugar en Hatay, donde una niña de 7 años fue encontrada con vida por los bomberos en un edificio colapsado.
En esta misma ciudad los brigadistas lograron liberar a un bebé de 10 días y a su madre que yacían bajo una montaña de escombros. El pequeño Yagiz y su madre fueron rescatados en el distrito Samandag de Hatay, por especialistas procedentes de Estambul, y luego derivados a un hospital.
En Siria
Una madre y sus dos hijos, de 22 y 24 años, fueron rescatados con vida en la localidad de Jableh, en la costa de Siria, después de permanecer casi cinco días bajo los escombros. Se trata de Nur, una mujer de 60 años, y sus hijos Ibrahim y Rauyia, de 22 y 24.