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El concepto de la “ciudad de 15 minutos” fue el tema central que abordó el arquitecto Germán Carmona desde Nueva York, en una nueva entrega del ciclo “Hablemos de lo que viene: Desarrollos urbanos SLA”.
En vivo desde norteamérica, el profesional salteño expuso sobre los nuevos desafíos para estos desarrollos urbanos.
“Todos somos expertos para hablar de las ciudades de 15 minutos. En una oración, es un lugar donde podemos caminar y acceder a todas las funciones de una ciudad y todos los servicios, en 15 minutos, caminando o en bicicleta”, resumió Carmona el inicio de una charla que resultó muy enriquecedora y que se transmitió en directo desde la redacción de El Tribuno a través de sus plataformas digitales.
La “ciudad de 15 minutos” es un concepto que surgió desde antes de la pandemia, según explicó el reconocido arquitecto. “Surge con el ser humano mismo, por la necesidad de buscar el aire libre, el espacio verde, y esa necesidad de poder esparcirse y disfrutar del espacio verde”.
Sin embargo, Carmona también alertó que alejarse de la ciudad buscando la naturaleza orgánica suele quitarle a las personas la esencia de esa vida urbana. “Entonces, no significa que tengamos que alejarnos y olvidarnos de la ciudad, tiene que haber un equilibrio”.
El ejemplo de Salta
Si se toma en cuenta el crecimiento de Salta y que su capital y alrededores en poco tiempo llegará a un millón de habitantes, Carmona ejemplificó: “Imaginemos que la ciudad de 15 minutos es una burbuja que abarca el microcentro. Ahora, en vez de pensar solo en el microcentro que tiene todos los servicios e infraestructura que uno necesita, imaginate que ahora la ciudad no es solo esa burbuja, sino que son múltiples burbujas que están conectadas, integradas, cohesivas”.
Pero más allá del concepto, para lograr este nuevo modelo de urbanidad, se necesita de varios factores. “Necesita de la gente misma, está en todos nosotros, mucha gente espera que esto ocurra desde la parte política y económica”.
Una experiencia sin fronteras
Durante la entrevista, Germán Carmona, que además es vicepresidente en HKS Arquitectos, una empresa mundialmente reconocida, desplegó con gráficos un gran trabajo que pudo verse en línea por quienes siguieron la transmisión. Y a modo de informe detalló: “He tenido la oportunidad de trabajar con los nombres más reconocidos del mundo, y he tenido la posibilidad de trabajar y diseñar, dejar la huella en todo el mundo. Siempre me preguntaron qué tipo de arquitectura hago, y siempre digo toda. Desde lo referencial, lo privado y hasta edificios públicos. Me he abierto al desafío para poder adaptarme con flexibilidad en este mundo cambiante”.
“El diseño urbano es el arte de reformar las ciudades, pueblos, distritos y barrios. En las últimas década he sido parte de más de 50 proyectos alrededor del mundo. Ayudando a fortalecer estas comunidades”, contó Germán.
“La pandemia nos ha diseñado otra realidad muy diferente, nos ha separado pero también nos ha unido globalmente”, añadió.
Luego se enfocó en una profunda explicación de la transformación de las “ciudades de 15 minutos”.
“El cambio vino junto a la cuarentena, y en Nueva York vivimos hacinados en monoambientes. Trabajamos desde casa y la realidad es otra. En la oficina tenemos suficientes espacio para mantener la distancia, pero una pareja de neoyorkinos trabaja hacinada en el mismo espacio donde comen y viven día a día. Los neoyorkinos siempre decimos que no necesitamos más que este monoambiente. Pues el living de la casa es la ciudad misma. La pandemia vino, la cuarentena nos atacó, y ahora vean como está el living por casa. Nuestra casa no está en orden, de hecho estamos peor que nunca, en lo económico, lo político, lo social y la salud. En la Argentina ocurre lo mismo”, dijo Carmona.
La exposición de Carmona
El profesional salteño mostró con imágenes el avance de los nuevos modelos de urbanizaciones con núcleos en diferentes lugares del mundo. “Hoy las ciudades no responden a las necesidades, pero tenemos esa necesidad por la naturaleza, nos mudamos a las afueras donde hay más verde, pero hemos perdido lo bueno que ofrece una ciudad, ahí es donde viene el desarrollo”, expresó Carmona. “Me refiero a la ciudad de 15 minutos, una solución que venimos empleando en muchas ciudades del mundo, la pandemia ha acelerado este proceso. Significa que, a una distancia de 15 minutos, caminando o en bicicleta, podamos experimentar la esencia que constituye la experiencia urbana. Y así poder acceder a residencias, trabajo, salud, educación, cultura, placer, esparcimiento sin tener que subirse a un vehículo, con todos los servicios de infraestructura que eso demanda. Entonces, ¿cómo creamos esta ciudad de 15 minutos?. Acá viene lo que todos sabemos. Nos tenemos que hacer la pregunta que hemos olvidado. ¿Cómo usamos la superficie del suelo y para qué la usamos? ¿Quién la usa? ¿Qué recursos tenemos y cómo los usamos?. Otro punto muy importante es: ¿hay parques?, ¿hay suficientes espacios verdes?, ¿hay plazas?, ¿hay fuentes para refrescarnos?, no todos tenemos piletas para refrescarnos. Hay que acordarse de todos los estratos sociales. ¿Hay suficientes árboles que provean sombras? No todos tenemos galería en casa. ¿Esencialmente hay espacios diseñados para disfrutar de la naturaleza, para pasar el tiempo con familiares y amigos?. Y lo más importante. ¿Por qué vivimos aquí y trabajamos allá?”
Según Carmona, la ciudad de 15 minutos está basada en cuatro pilares: la ecología (para una ciudad verde y sustentable), la proximidad, la solidaridad (para crear conexiones entre las personas) y la participación (todos deben involucrarse).
“Y no nos equivoquemos -alertó-, la ciudad no está tratando de convertirse en aldeas rurales. La vida urbana es vibrante y creativa, y eso tenemos que lograrlo entre todos”.
París, el ejemplo
Germán aseguró que París es pionera en la reconversión, tras desarrollar nuevos nodos de servicios para cada distrito y barrio, una reducción de tráfico aumentando las bicisendas y espacios de esparcimientos. “Y nuevos modelos económicos para fomentar el comercio local y, eso sí, mucho verde”.
De París, Carmona llevó sus explicaciones a Salta, más precisamente a San Lorenzo Chico, donde desde hace un par de años se desarrolla un proyecto suburbano con los objetivos de una ciudad de 15 minutos. “Hicimos un sitio para ir a trabajar o tomar un café, y para comprar papel higiénico no tenemos que subirnos al coche y subirnos a una autopista”.
“El sitio es muy agradable -continuó- donde hay mucho verde, pero la mayoría de ese verde es privado y no hay todavía suficiente espacio público para la participación e integración de la comunidad”.
“En una esquina donada por los vecinos, para mejorar el tránsito y evitar embotellamientos, hemos comenzado el nodo catalizador de una nueva ciudad de 15 minutos, con desarrollos comerciales y oficinas”, dijo Carmona mientras mostró algunos gráficos. “Pero lo que más me gusta es que el 70% de estos espacios abiertos son para el uso público, para esparcimiento, uso y disfrute de todos”, concluyó. “Hay un centro lejos del centro, todo a corta distancia, a pie o en bicicleta, solo a 15 minutos como máximo. Es solo el principio en San Lorenzo Chico y trataremos de expandirnos en la Salta, que está creciendo tan rápi do”.