Hoy en día, muchas personas suelen tatuarse para superar miedos, comunicar pasiones o inspiraciones, o sencillamente plasmar el arte en su cuerpo. De hecho, antiguamente los tatuajes se realizaban con una simple aguja con la punta impregnada en tinta y un pequeño palo de madera.
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Hoy en día, muchas personas suelen tatuarse para superar miedos, comunicar pasiones o inspiraciones, o sencillamente plasmar el arte en su cuerpo. De hecho, antiguamente los tatuajes se realizaban con una simple aguja con la punta impregnada en tinta y un pequeño palo de madera.
De acuerdo con el portal web Curiosfera, la aguja se colocaba sobre la piel y poco a poco se iban dando pequeños golpecitos con la madera para perforar la piel y que la tinta quedase debajo de ella. Sin embargo, actualmente este procedimiento es completamente distinto, pues para poder hacer un tatuaje, lo primero que se necesita es una máquina de tatuar con la que se talla la piel por medio de distintas tintas.
Entre los cuidados que se deben tener al momento de hacerse un tatuaje está la limpieza y la alimentación, pues no se pueden consumir ciertos alimentos dado que un tatuaje implica tener una herida abierta que se puede llegar a infectar. Por ello, el portal web Tua Saúde da a conocer diez alimentos que se deben restringir cuando se realiza un tatuaje.
- Refrescos y gaseosas.
- Jugos envasados.
- Comida rápida, helados, edulcorantes artificiales y bebidas alcohólicas.
- Frituras y alimentos ricos en grasas como papas fritas, pasteles fritos, comidas rápidas, pizza congelada, nuggets y botanas saladas.
- Cortes de carne con grasa, carne procesada y embutidos como salchicha, jamón serrano, longaniza, tocino, mortadela, salami.
- Alimentos ricos en azúcares e industrializados como dulces, galletas rellenas, pasteles, masas prefabricadas para tortas, chocolates, barras de cereal.
- Jarabe de maíz.
- Chocolate blanco o de leche.
- Fideos instantáneos, caldo de carne en cubos, helados, salsa de tomate, mayonesa y cualquier otro tipo de salsa comercial.
- Comida congelada tipo nuggets, lasañas y pizzas.
Según los expertos en salud, el consumo excesivo de estos alimentos aumenta la inflamación y dificulta el proceso de cicatrización de la piel, debiendo evitarse durante 2 a 4 semanas, que es el período de mayor cicatrización.
¿Qué alimentos se pueden consumir para la cicatrización de un tatuaje?
Tua Saúde indica que para acelerar el proceso de cicatrización de la piel, se deben consumir alimentos ricos en vitaminas C, E y A, pues poseen acción antioxidante; compuestos antiinflamatorios, como el omega 3; y alimentos ricos en proteínas, ya sean de origen animal o vegetal.
“Algunos alimentos ricos en antioxidantes son: avellanas, cacahuates, almendras, aguacate, calabaza, zanahorias, naranjas, brócoli, ajo, cebolla, frutos rojos, tomates, mandarina, mango, camote, acelgas, pimentón, plátano y espinacas, por ejemplo”, indica el portal en mención.
Adicional a estos alimentos, también se aconseja consumir unos antiinflamatorios que son aquellos ricos en grasas buenas, como el salmón, atún, sardina, aceite de oliva y las semillas de chía, linaza y sésamo.
¿Cuáles son los síntomas de un tatuaje infectado?
Es importante conocer algunos síntomas que se presentan cuando un tatuaje está infectado: Piel roja o abultada, con erupciones, alrededor del área en donde se encuentra.
Sin embargo, se debe tener en cuenta que no en todos los casos se trata de una infección. Puede suceder que la piel solo esté irritada por la aguja, especialmente sucede en personas con piel sensible. “Si este es el caso, los síntomas deberían desaparecer después de unos pocos días”, de acuerdo con el portal.
En el caso de que los síntomas permanezcan durante una semana o más, la persona debe consultar de inmediato con el diseñador de tu tatuaje o con un médico.
En este último caso, de requerir a un médico, se deben tener en cuenta estos síntomas: fiebre, sentir olas de calor o frío, estremecimiento anormal, inflamación del área tatuada, pus que sale del área tatuada, lesiones rojas alrededor del área tatuada y áreas de tejido duro o elevado.