Por Emiliano Saavedra
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Por Emiliano Saavedra
La inflación repercute en todos los sectores de la economía. En Jujuy el coqueo es una práctica de gran arraigo e implica el consumo de un producto que proviene del país vecino de Bolivia, habiéndose registrado aumentos en lo que va del año.
Tras un recorrido y relevamiento de El Tribuno de Jujuy por distintos puestos de la feria ubicada sobre la avenida El Éxodo, es que se pudo saber que el precio se incrementó un %16,6, según los vendedores.
La coca cochala, que se caracteriza por tener palos, ser de color más oscuro, tiene un costo de entre $1.300 y 1.600 el cuarto kilo. La común paceña de mejor color se consigue a $1.600 el cuarto. La hojeada está a $2.500 y hasta $3.000 dependiendo la calidad. La especial paceña o elegida se vende a $ 3.500 o $3.800 y la machucada a $3.800 y $4.000, siendo la más pedidas la de sabor maracuyá.
Si bien la venta es legal, pero no el ingreso de las hojas de coca, los vendedores de este producto dijeron que "notamos que hay una escasa venta". Pese a estos comentarios, las personas que antes compraban un cuarto de kilo de coca ahora piden llevar la mitad (125 gramos), una alternativa para seguir consumiéndola.
Las ventas se empiezan a mover con mayor frecuencia en los festejos alusivos al carnaval, Pachamama y la fiesta de todos los Santos. Pese a que la provincia ya volvió a la normalidad tras la pandemia, la venta recuperó terreno gracias a las variedades que ofrecieron los puesteros con agregados de esencia como ser de maracuyá, banana, chile, ron, stevia, entre otros.
Los vendedores también explicaron que se vio un aumento considerable en la compra de hojas de coca en los turistas que viajan al norte y a otras partes del país. El precio que se comercializa en almacenes de los barrios es aun más elevado.