Las historias de fe se multiplican este 15 de septiembre. Una familia vino de Tucumán para participar de la Procesión del Señor y la Virgen del Milagro, con el propósito de agradecer lo que para ellos fue un verdadero milagro.
"He venido desesperada porque mi hijo se había enfermado de cáncer, tenía 20 años, ahora él tiene 44, mi hijo está completamente curado", dijo Lidia ante las cámaras de El Tribuno.
La mujer contó que desde el 2003 recorre los 300 kilómetros que separan Tucumán de Salta, para agradecer a los Santos Patronos. "Cada vez que puedo vengo, porque esa fue mi promesa, voy a seguir viniendo", añadió Lidia, quien vino acompañada por otros familiares.
Uno de los hijos de Lidia tiene parálisis cerebral, "pero estoy agradecida de Dios, vi otros chicos que no viven tanto como él. A pesar de sus limitaciones, es un chico sano".
Hubo otro milagro dentro de la familia de Lidia. Su sobrina, Analía, también se curó la grave enfermedad del cáncer, según lo aseguró su madre, Elena, hermanada de Lidia.
"Vengo desde hace 25 años para que mis hijos y mi familia sigan sanos", expresó la mujer.
Analía, por su parte, coincidió con el pedido de la salud "para toda la familia de Tucumán, somos muy unidos, muchos no pudieron venir", dijo.
"Hemos atravesado muchas cosas feas, pero la fe la voy a seguir teniendo, hace seis meses falleció mi marido", contó Lidia con los ojos cargados de lágrimas y una profunda emoción, la emoción que provoca el milagro salteño.