¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

10°
19 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

La venganza, el plato frío de Putin

Lunes, 28 de agosto de 2023 00:00

El presunto deceso del fundador del temible grupo de mercenarios Wagner, Yevgeny Prigozhin, se produjo justo dos meses después de que este protagonizara el desafío más serio al poder del presidente ruso, Vladimir Putin, en las más de dos décadas que tiene en el Kremlin despierta sospechas dentro y fuera del país.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

El presunto deceso del fundador del temible grupo de mercenarios Wagner, Yevgeny Prigozhin, se produjo justo dos meses después de que este protagonizara el desafío más serio al poder del presidente ruso, Vladimir Putin, en las más de dos décadas que tiene en el Kremlin despierta sospechas dentro y fuera del país.

¿La razón? No sería la primera vez que los servicios secretos rusos se deshacen definitivamente de opositores, disidentes o críticos al mandatario.

Aunque la insurrección no llegó a más, gracias a unas negociaciones en las que participó el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, el hecho de que los soldados de Wagner ocuparan una ciudad y avanzaran casi hasta las puertas de la capital, sin casi resistencia, puso fin al mito del control total que Putin ejercía sobre el país.

El que Prigozhin se pudiera mover con libertad dentro de Rusia y en el exterior en las últimas semanas parece probar que el mandatario es de los que cree que "la venganza es un plato que se sirve frío".

Durante el gobierno de Putin al menos una veintena de opositores, críticos o "traidores" han muerto en extrañas circunstancias tanto en Rusia como en el exterior.

Uno de los primeros fue el diputado Vladímir Golovliov, quien fue baleado en Moscú cuando paseaba a su perro. El legislador, que en un principio apoyó al mandatario en su ascenso al poder a principios de siglo, rompió con él al poco tiempo y comenzó a criticarlo.

Menos de un año después, Serguéi Yushenkov, otro diputado liberal, fue tiroteado en las calles de Moscú.

Yushenkov presidió el comité parlamentario que investigó los atentados contra unos edificios de apartamentos ocurridos en septiembre de 1999. El malogrado legislador sospechaba que los atentados fueron orquestados por los servicios secretos rusos.

El 7 de octubre de 2006 se registró el asesinato de la periodista Anna Politkovskaya, quien desde el diario ruso Novaya Gazeta denunció las violaciones a los Derechos Humanos cometidas por las tropas del Kremlin en Chechenia.

El 27 de febrero de 2015 fue asesinado el ex viceprimer ministro Boris Nemtsov. El crimen se registró cerca del edificio donde Putin tiene su despacho. En las elecciones presidenciales de 2008 intentó competir contra el mandatario y un año después al excampeón mundial de ajedrez Garry Kasparov fundó el partido Solidaridad.

Pero en la lista de opositores y disidentes muertos no solo figuran personas que estaban en Rusia, sino también otras que decidieron huir del país.

El exespía Alexander Litvinenko falleció en un hospital londinense en noviembre de 2006. Una investigación arrojó que el exagente fue envenenado con polonio 210 (un material altamente radioactivo).

Litvinenko se había refugiado a principios del siglo, luego de que denunciara que sus superiores le habían ordenado que asesinara al oligarca Boris Berezovksy. En marzo de 2013 el cadáver del empresario fue encontrado dentro de su residencia en Surrey, en el sureste de Inglaterra.

En marzo de 2018 otros disidentes rusos exilados en Reino Unido fueron víctimas de un atentado presuntamente orquestado por Moscú. El exespía Serguéi Skripal y su hija Yulia fueron envenenados con Novichok, un potente veneno, por supuestos agentes rusos en la ciudad inglesa de Salisbury.

Uno de los decesos más llamativos fue el del presidente del gigante petrolero ruso Lukoil, Ravil Maganov, quien en septiembre de 2022 murió tras "caerse de una ventana" en el hospital moscovita donde estaba internado, reportaron las autoridades.

"El mensaje de Putin durante las últimas dos décadas ha sido claro: la oposición no será tolerada y tendrá consecuencias fatales", advirtió el profesor de la Universidad de Birmingham Stefan Wolff en un artículo.

 

PUBLICIDAD