El día fue muy agitado y el precio del dólar blue parece no encontrar techo alguno. Es que ayer por la tarde en la city salteña los arbolitos llegaron a pedir hasta $520 por cada dólar.
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El día fue muy agitado y el precio del dólar blue parece no encontrar techo alguno. Es que ayer por la tarde en la city salteña los arbolitos llegaron a pedir hasta $520 por cada dólar.
El Tribuno realizó una recorrida por España esquina Mitre y se dio con muchos arbolitos que ofrecían moneda estadounidense. El panorama era de mucha gente consultando precios y pocos comprando.
Lo cierto es que había mucha dispersión en el precio. Algunos lo vendían a $505, otros $510 y así llegaban a pedir $520. Había variación en el precio si se compraba de 1.000 dólares para arriba.
En tanto, si uno les vendía sus dólares a los cambistas, recibía $480 y, en el mejor de los casos, podía conseguir $490 por cada billete verde, dependiendo de la cantidad que vendía.
En tanto, hacia el mediodía, mientras se mostraba en las pantallas de televisión que en Buenos Aires llegaba a $495, en la city salteña los arbolitos lo vendían a $496. Con el paso de las horas, el precio escaló. Y para hoy hay incertidumbre de lo que pueda llegar a pasar.
Mirada de un especialista
"La escalada actual del dólar era obvio y más que esperable. Estamos en un contexto inflacionario, estamos en una dinámica de inflación. Entonces el dólar se tiene que mover, los precios se tienen que mover. Sería extrañísimo que el dólar baje y los precios suban. Así nos estaríamos poniendo caros el dólares. Es ficticio que el dólar se atrase como están haciendo, como han hecho con el dólar oficial, favoreciendo a los importadores", señaló a El Tribuno Álvaro Pérez, quien es contador y dirige la consultora Finex.
El especialista en finanzas agregó que necesitamos tener las variables ajustadas a la realidad, no que nos pongan variables de "cotillón". "Lo doloroso es que todo pasa en un solo momento, en una semana, se genera presión, gana velocidad. Y eso genera una tensión. No hay precio de reposición, no va a haber alquileres, todo para. Todos te dicen que esperés un poquito hasta que se tranquilice", aseguró.
Pérez apuntó al Gobierno nacional, ya que señaló que este momento de tensión se genera por una serie de medidas que se han ido acumulando a lo largo del tiempo y no es que esto pasó de un momento a otro.
Para graficar la situación, dijo que esto es "una olla a presión que acumula distorsiones y desequilibrios y lo va a seguir haciendo y va a seguir acumulando desequilibrios".
En otro punto, hablando de qué piensa que podría hacer el Gobierno nacional, tuvo una mirada pesimista. "El Gobierno tiene muy pocas herramientas. Se quedó sin alfiles en el tablero de ajedrez, es difícil. No tiene elementos", dijo y enumeró las cosas de las que carece: "No tiene forma de tomar créditos, no tiene forma de expandir el gasto. De repente podrían aparecer una serie de medidas y ya nadie confía, entonces se queda sin herramientas".
Con este escenario, Álvaro Pérez afirmó que habrá que esperar que la "política decida" cómo se sigue, teniendo en cuenta que faltan varios meses para agosto que son las PASO nacionales y mucho más hasta fines octubre, cuando sean las generales. "Solamente un nuevo gobierno, una nueva administración, con un plan claro, transparente, realizable y aceptable, puede superar este momento", aseguró. Sin embargo, dijo que hay un "acuerdo social" de bancar esta situación sin llegar a un estallido social.
Dolarización
Consultado sobre cómo ve un plan de dolarización como el que propone Javier Milei, dijo que "no es descabellado pensar que la única solución argentina al flagelo de la inflación es cambiar el signo monetario. Con eso vamos a estar todos de acuerdo. Porque en el peso ya nadie confía. Y aclaro que esa variable puede ser viable y posible siempre que la política y que la sociedad lo soporten y acepten".
Sin un plan, crece la desconfianza
"Desde que asumió este gobierno nunca tuvo un plan económico y ahora menos, entonces evidentemente genera desconfianza, sumándole a esto el Banco Central no tiene dólares y se produce una sequía que agrava el problema. Esto genera una crisis que puede llegar a transformarse en una de recesión", señaló a este diario el economista Valeriano Colque.
El especialista explicó que la gente que tiene la plata en plazo fijo la está retirando para comprar dólares, porque si la mantiene ahí pierde ante la inflación, y que el dólar no sube más porque hay gente que quiere mantenerlo, ya que no sabe a qué precio puede venderlo el día de mañana.