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18 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
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Lidia pide ayuda para que su hija accidentada se recupere

Espera solidaridad para que Camila vuelva a ser la misma de antes de caerse a un pozo con la moto. Tel. 3873 605749 - CBU: 0110514830051480223747.
Lunes, 23 de enero de 2023 01:43

Agencia Tartagal

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Agencia Tartagal

La paz y la tranquilidad de la familia Gallardo se terminó la noche del 8 de mayo pasado cuando Johana y Camila, de 15 y 20 años, transitaban por la calle Carlos Gardel en cercanías del puente sobre el río Tartagal. A menos de una cuadra de su casa, a bordo de la motocicleta que conducía una de las chicas, con escasa iluminación en todo ese tramo, se dieron de pronto con un tremendo pozo que se había excavado para hacer reparaciones en el sistema cloacal. Si bien se trataba de una instalación de Aguas del Norte, la empresa y el municipio se tiraron la responsabilidad desde ese momento, de que el pozo profundo hubiese quedado destapado y sin ser señalizado. Al día siguiente del accidente, personal del municipio lo tapó.

La motocicleta de las hermanas quedó dentro del pozo y por el tremendo impacto la conductora del rodado perdió varias piezas dentales. Pero la peor parte se la llevó Camila, de 15 años, quien sufrió un golpe en la cabeza. Una semana después, cuando ya estuvo compensada la adolescente, debió ser trasladada hacia la capital de la provincia donde le detectaron un tumor en una zona del cerebro no operable o al menos eso le dijeron a su mamá, Lidia Costa, que desde ese momento peregrina para que su hija menor se recupere ya que Johana recuperó las piezas dentales, ya volvió a trabajar y de a poco sigue mejorando.

Otra opinión profesional

Cuando estuvo internada en Salta capital, Camila fue sometida a diversos estudios y allí le detectaron el tumor en la cabeza. "Hasta ese momento mi hija era una chica feliz, con una vida normal como cualquier otra adolescente. Iba a la escuela, estudiaba y hacía lo que cualquier niña de su edad. Pero desde el accidente está encerrada, perdió la visión de un ojo, escucha con un solo oído, sufre dolores de cabeza constantes, está siempre mareada y lo único que quiere es dormir. En Salta los médicos me dijeron que el tumor que tiene no es operable y le encontraron un quiste. Me dicen que si la tocan le puede afectar todo el sistema endocrinológico y que va a tener que tomar de por vida un montón de hormonas".

La endocrinóloga que la trató, según recordó Lidia, "me hizo todos los contactos con un neurocirujano muy prestigioso que trabaja en Tucumán. Yo quiero que él la vea y tener esa segunda opinión porque tengo plena fe en Dios de que mi hija se puede curar. Hace 9 meses que se encuentra en ese estado tan lamentable y como mamá quiero hacer todo lo humanamente posible para que vuelva a ser lo que era antes", expresó la madre que peregrina desde el accidente con su niña enferma.

"Los médicos prácticamente la dejaron en manos de la endocrinóloga, pero esta doctora me dice que ella no tiene la solución para la salud de mi hija y me consiguió el turno en Tucumán", expresó.

Lidia pide colaboración a quienes puedan ayudar "para los dos pasajes de colectivo hacia Tucumán; la estadía y la comida. La misma doctora endocrinóloga que trabajó en Tucumán consiguió el turno para el día lunes 23 (hoy) para que la atienda ese neurocirujano porque ve mi angustia y desesperación. El médico que la verá es el Dr. Álvaro Campero y la atenderá a las 8 de la mañana, pero todavía no sabemos cuánto tiempo nos tendremos que quedar. Como sea, nos vamos así yo tenga que tomar solo agua".

Hasta el momento Lidia se concentró solamente en la recuperación de su niña "y nunca me ocupé de hacer juicios ni nada. Mi esposo es obrero municipal y entre sus compañeros hicieron una nota para poder colaborar todos desde su bolsillo para ayudarnos; eso fue cuando se produjo el accidente, pero le dijeron que la nota se extravió".

A la infortunada mamá, cuando se produjo el hecho el municipio le había donado la suma de $20.000, pero la secretaria de Gobierno Natalia Loria le exigía que haga una suerte de rendición de cuentas de todos los tickets en lo que había gastado la escasa suma de dinero por lo que Lidia no quiere saber más nada con volver al municipio a pedir alguna colaboración.

"Es una situación que no se la deseamos a nadie, no solo por la angustia de ver así a nuestras hijas sino por los gastos que representa llevarla a Salta. Ni Aguas del Norte ni la Municipalidad se quieren hacer cargo porque de ambos lados dicen no saber quién hizo el pozo donde cayeron mis hijas. Pero ahora la prioridad es que a mi hija la vea ese neurólogo de Tucumán para que me diga si la pueden operar o qué tratamiento hay".

Lidia espera la colaboración de los salteños para tener una segunda opinión médica que le da una luz de esperanza para que Camila vuelva a ser la misma de antes del accidente. Tel. 3873 605749 CBU: 0110514830051480223747.

 

 

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