Después de saludar a miles de salteños en la caravana, Kevin Benavides llegó al monumento a Güemes y agradeció a toda la gente que le mostró su afecto: "Es difícil hablar con semejante recibimiento, es realmente increíble. Quiero agradecer de corazón a cada uno de ustedes que hicieron fuerzas por mí y por mi hermano Luciano en la carrera más difícil del mundo", sostuvo.
inicia sesión o regístrate.
Después de saludar a miles de salteños en la caravana, Kevin Benavides llegó al monumento a Güemes y agradeció a toda la gente que le mostró su afecto: "Es difícil hablar con semejante recibimiento, es realmente increíble. Quiero agradecer de corazón a cada uno de ustedes que hicieron fuerzas por mí y por mi hermano Luciano en la carrera más difícil del mundo", sostuvo.
"He podido conseguir el primer puesto por segunda vez, en esta oportunidad con un equipo nuevo y ha sido un Dakar muy difícil en el cual creo que haber estado muy bien entrenado físicamente y sacrificado un montón", agregó quien sumó su segundo beduino tras la obtención en 2021 con Honda y en esta edición con KTM.
El salteño, uno de los principales deportistas de la historia de estas tierras, dejó en claro algo: "Me enorgullece un montón representar a mi provincia y a mi país. Creo que vale la pena todo el esfuerzo, en la última etapa lo he dado todo, mi 110% y con mucho corazón".
Y agregó: "Acá estamos, este es un triunfo no solo mío sino de toda la gente que me acompaña".
En compañía de sus padres Isis Grifasi y Norberto Benavides y su hermana Agostina, Kevin no quiso olvidarse de ellos: "Quiero agradecer a mi equipo que me acompaña, a mi familia que es el sostén de todo, a mi novia y mis amigos".
Minutos antes, el piloto de KTM fue consultado por El Tribuno sobre su futuro y dijo que ahora "es el momento de disfrutar y después se verá qué es lo que va a pasar más adelante".
Luego de ganar el Dakar, lejos de dormirse en los laureles, el mayor de los Benavides aclaró que tiene otro desafío en mente, el Mundial de Rally Cross Country: "Estoy puntero y obviamente me gustaría ganarlo".
Al igual que el campeón del Dakar, Luciano Benavides fue recibido con mucho cariño por la gente y no es para menos: fue el piloto con más victorias en esta edición y además igualó su mejor registro al terminar sexto.
"Realmente no me entra la emoción en el cuerpo, tengo una alegría increíble y no me imaginé que nos iban a recibir así", sostuvo con sus medallas en el pecho.
"Compartir la emoción con mi hermano que es un placer verlo ganar por segunda vez. No es casualidad. Los dos estamos en un nivel de elite, nos arriesgamos la vida y es un deporte de mucho sacrificio. Estoy orgulloso de todo lo que se dio pese a no haber estado en el podio", agregó en relación a la carrera de Arabia Saudita. Y, como Kevin, resaltó: "Estoy muy feliz de representar a Salta y a la Argentina".
"Cuando estamos en el desierto corremos solos, pero sentimos el cariño de toda la gente que nos sigue, a todos los amigos, a la familia y a quienes siempre están pendientes", agradeció.
A El Tribuno contó que "ahora vence mi contrato, pero Husqvarna está muy contenta conmigo y yo muy cómodo. Quiero seguir perteneciendo a la familia KTM y ojalá se nos dé correr juntos con Kevin".