Isis Grifasi y Agostina Benavides sufrieron y festejaron a 13 mil kilómetros de distancia. Las dos integrantes de la familia que no pudieron acompañar en el Medio Oriente lo hicieron desde Salta y, tras un domingo apasionante e inolvidable, dialogaron con El Tribuno sobre la actualidad de Kevin y Luciano, los mejores argentinos de la competencia con cinco victorias de etapas para los dos (tres para el menor y dos para el campeón).
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Isis Grifasi y Agostina Benavides sufrieron y festejaron a 13 mil kilómetros de distancia. Las dos integrantes de la familia que no pudieron acompañar en el Medio Oriente lo hicieron desde Salta y, tras un domingo apasionante e inolvidable, dialogaron con El Tribuno sobre la actualidad de Kevin y Luciano, los mejores argentinos de la competencia con cinco victorias de etapas para los dos (tres para el menor y dos para el campeón).
"Sufrimos al estar lejos y porque se nos haga imposible viajar por las condiciones de Arabia Saudita, pero sacando eso, lo vivimos de una manera increíble porque no sabés qué pasa, estás detrás de una computadora y estamos rogando hasta una vez que pasan algún punto de control".
Madre e hija dijeron que durante 15 días "o no dormíamos o teníamos que poner el despertador y estar despiertas hasta que salga el resultado de cada etapa".
La familia Benavides no solo está orgullosa del campeón, sino del más ganador por etapas: "Tengo a los mejores hermanos, estoy muy feliz por los dos, sé del sacrificio y esfuerzo que hicieron", contó Agostina.
Y, a diferencia de años anteriores, esta vez ambos pudieron destacarse: "Es tremendo consolar a uno y festejar por el otro, pero en este Dakar fue todo increíble, se lo dije a Luciano por teléfono. Él demostró un nivel de carrera impresionante, hizo un vuelco total y estuvo a poco de pelear el primer puesto".
Lo de Kevin no es una novedad, pero Luciano Benavides terminó de consolidarse en la competencia y así lo cree su familia: "Tuvo un año maravilloso, un gran crecimiento personal y eso se notó arriba de la moto. Sabíamos que los dos estaban para ganarlo al Dakar y esta vez se le dio a Kevin", dijo Agostina. Isis completó: "Luciano tenía que hacer un click en él y lo logró. No se daba cuenta del potencial que tenía. Es que tener un hermano como Kevin que gana todo no debe ser fácil porque, pese a ser hermanos, son rivales. Ahora demostró que puede pelear mano a mano. Yo estoy feliz por ambos".
Madre e hija compartieron las cábalas que usaron durante la carrera como el dibujo que realiza Agostina año a año del "beduino (el logo del Dakar)". "Tenemos muchas, como no desarmar el árbol de Navidad", dijeron entre risas.