El cirujano plástico Gabriel Chagra Dib, exministro de Salud de la Provincia, consideró como una avance importante la ley de pirotecnia sonora cero que se aprobó días atrás en la Legislatura salteña. "No es el proyecto original que yo había presentado en 2011 o 15 años antes, allá por 1995, en el Concejo Deliberante capitalino, pero es un paso hacia eso", sostuvo el cirujano plástico. Su proyecto apuntaba a la pirotecnia cero, sin diferenciar la sonora de la otra. "Hoy se sanciona un proyecto para prohibir la pirotecnia sonora, con lo cual se alcanzaría el 70% del objetivo. Queda pendiente un porcentaje de pirotecnia no sonora que también produce daños", remarcó.
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El cirujano plástico Gabriel Chagra Dib, exministro de Salud de la Provincia, consideró como una avance importante la ley de pirotecnia sonora cero que se aprobó días atrás en la Legislatura salteña. "No es el proyecto original que yo había presentado en 2011 o 15 años antes, allá por 1995, en el Concejo Deliberante capitalino, pero es un paso hacia eso", sostuvo el cirujano plástico. Su proyecto apuntaba a la pirotecnia cero, sin diferenciar la sonora de la otra. "Hoy se sanciona un proyecto para prohibir la pirotecnia sonora, con lo cual se alcanzaría el 70% del objetivo. Queda pendiente un porcentaje de pirotecnia no sonora que también produce daños", remarcó.
En 1995 Gabriel Chagra Dib se desempeñaba como jefe de servicio del Área del Quemado del entonces Hospital de Niños. "Veíamos niños quemados y niños mutilados. Yo como cirujano plástico sigo viendo este tipo de daño en pacientes adultos, con desfiguración de rostro y amputación de genitales inclusive, sin dejar de lado a quienes perdieron parte de sus miembros y hasta sus propias vidas, porque su vivienda se incendió por una cañita voladora, que es pirotecnia no sonora", puntualizó el profesional al hacer hincapié en la importancia de aprobar una ley más completa.
"Creo que esto es un avance importante, es más positivo que negativo respecto a la prohibición. En los 90 éramos muy pocos los que hablábamos de la pirotecnia. Había un factor cultural importante y fuertes intereses comerciales", remarcó.
El facultativo recordó que el proyecto original, para amortiguar las pérdidas económicas en comercios del rubro, contemplaba "la inversión en fuegos artificiales subvencionados por el Estado, teniendo en cuenta que el gasto de la Provincia en las internaciones y los tratamientos de recuperación de niños quemados era superior al que se gastaría en fuegos de artificio manejados por manos expertas".
Avances
De todos modos, Chagra Dib estimó que con la ley aprobada se instalará el tema en la sociedad y podría llegar a suceder lo que en su momento pasó con el fumar en espacios públicos cerrados. "Hace unos años a nadie se le podía ocurrir que no se podría fumar en un lugar público. Si alguien se quejaba por ello, su reclamo era tomado como una actitud que conducía hacia una pérdida de derechos, hasta que un día la sociedad lo entendió y se hicieron las leyes necesarias para que el fumar en espacios públicos cerrados no fuera más importante que preservar la salud de la mayoría de las personas. Entonces me da una gran satisfacción ver que la lucha de las personas con autismo, de la sociedad protectora de animales o de quienes no queremos seguir viendo vidas arruinadas, en algún momento da los primeros frutos", enfatizó Chagra Dib, tras abogar por la insistencia en el debate de una ley de pirotecnia cero. "Entiendo que este proyecto se hizo pensando en un sector y no en la totalidad de los inconvenientes que trae la pirotecnia, sobre todo en niños, que es adonde apunto yo desde mi perspectiva médica", acotó.