Ante los focos ígneos que persisten en Valle Morado y otras áreas boscosas del oeste de Orán, la comunidad de ese departamento sigue expectante a los esfuerzos con los que brigadistas de Salta y de otras provincias intentan desactivar los incendios forestales. Buena parte de sus 167.000 habitantes también se pregunta cuándo llegarán las lluvias que se están haciendo extrañar como pocas veces en esas serranías, al igual que en las de El Oculto (Islas de Cañas) y Bella Vista (Chicoana).
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Ante los focos ígneos que persisten en Valle Morado y otras áreas boscosas del oeste de Orán, la comunidad de ese departamento sigue expectante a los esfuerzos con los que brigadistas de Salta y de otras provincias intentan desactivar los incendios forestales. Buena parte de sus 167.000 habitantes también se pregunta cuándo llegarán las lluvias que se están haciendo extrañar como pocas veces en esas serranías, al igual que en las de El Oculto (Islas de Cañas) y Bella Vista (Chicoana).
Para las últimas horas de hoy el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) tiene pronosticadas algunas precipitaciones en esas regiones. El sábado último, a través del programa "Claves de Campo", de Radio Salta, Eduardo Sierra anticipó que se serán lluvias aisladas y de poca intensidad.
El especialista en agroclimatología precisó que el próximo jueves "se presentarían buenas lluvias en la línea de Las Lajitas y Tartagal, además del oeste del Valle de Lerma, con descenso de la temperatura".
Tras remarcar que por varios días más solo se esperan lluvias aisladas, Sierra adelantó recién en la próxima semana habrá "tormentas interesantes consideradas tempranas".
Tras puntualizar que para el sábado 12 se aguardan "lluvias en la zona del chaco salteño, con ingreso de aire frío para toda la región", el reconocido agroclimatólogo precisó que el jueves 17 una entrada de "viento norte con humedad" se traduciría en lluvias de buena intensidad sobre Orán, Tartagal y el Valle de Lerma.
Sobre los incendios producidos en Salta, Sierra señaló que la condición de la biomasa, la sequedad del ambiente y las altas temperaturas formaron en los últimos tiempos "un coctel perfecto". En este punto, el ingeniero agrónomo especializado en climatología destacó el rol decisivo que tuvieron las recientes heladas, al matar vegetación y hacerla altamente combustible.
Sierra recalcó que los incendios son parte de ciclos que incluyen años en los que se junta biomasa y que son seguidos por otros años con las condiciones con que Salta llegó a noviembre. "Es el mes que en el NOA siempre ha sido el más caluroso, seco y problemático, por el agotamiento de los reservorios de agua", subrayó, tras sostener que ante la fase negativa del clima que empezó en 2007 se debió pensar en tomar medidas preventivas. "Desde hace algunos años las zonas incendiables cercanas a la ciudad deberían tener cortafuegos, limpieza regular y trabajos preventivos que no son un misterio", acotó.