El Bayern de Múnich dio un golpe de autoridad en su visita al campo del subcampeón, el Tottenham, al imponerse por 7 a 2 al conjunto inglés, en un encuentro que alumbró el nacimiento de una nueva estrella: el atacante Serge Gnabry, autor de cuatro de los siete tantos del conjunto alemán.
En un partido destinado a convertirse en un duelo entre Harry Kane y el polaco Robert Lewandowsi, "quizá los dos mejores delanteros centro del mundo en estos momentos", como aseguró el director ejecutivo del Bayern, Karl-Heinz Rummenige, el protagonismo recayó, al menos de inicio, en los porteros Hugo Lloris y Manuel Neuer.
inicia sesión o regístrate.
El Bayern de Múnich dio un golpe de autoridad en su visita al campo del subcampeón, el Tottenham, al imponerse por 7 a 2 al conjunto inglés, en un encuentro que alumbró el nacimiento de una nueva estrella: el atacante Serge Gnabry, autor de cuatro de los siete tantos del conjunto alemán.
En un partido destinado a convertirse en un duelo entre Harry Kane y el polaco Robert Lewandowsi, "quizá los dos mejores delanteros centro del mundo en estos momentos", como aseguró el director ejecutivo del Bayern, Karl-Heinz Rummenige, el protagonismo recayó, al menos de inicio, en los porteros Hugo Lloris y Manuel Neuer.
El guardameta francés del Tottenham evitó a los dos minutos un gol del conjunto alemán con una sensacional parada a un remate de Serge Gnabry y cuatro minutos después fue el cancerbero del Bayern el que evitó que se abriera el marcador con una fantástica parada al surcoreano Heung-Min Son.
Luego vino el show de goles: a los 12, Son Heung-min marcó el primero para el equipo que dirige Mauricio Pochettino, a los 15' Joshua Kimmich estableció el empate 1-1, Lewandowski dio vuelta el partido a los 45 minutos. En el segundo tiempo, Serge Gnabry se lució con sus cuatro goles: a los 8, 10, 38 y 43 minutos, mientras que Harry Kane había marcado el empate parcial, y Lewandoski competó tremenda paliza.