No es novedad que las emisiones de gases de los vehículos dañan profundamente al medio ambiente. Pero más allá de los niveles imperceptibles, los camiones y colectivos en Salta llevan la delantera en cuanto al nivel de humo que arrojan al espacio. Como para muestra hace falta un botón, el camión que puede apreciarse en la fotografía circulaba esta mañana por avenida Ragone, frente al mercado Cofruthos, dejando la visibilidad a niveles prácticamente nulos a los quienes ocasionalmente circulaban por allí. Y del daño al medio ambiente, ni hablar. Pero esta, si bien es una postal extrema, no son pocos los vehículos de gran porte: camiones, colectivos y camionetas que circulan por la ciudad de Salta y las principales rutas del Valle de Lerma, dejando a su paso una estela similar a la de los aviones de propulsión a chorro.
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No es novedad que las emisiones de gases de los vehículos dañan profundamente al medio ambiente. Pero más allá de los niveles imperceptibles, los camiones y colectivos en Salta llevan la delantera en cuanto al nivel de humo que arrojan al espacio. Como para muestra hace falta un botón, el camión que puede apreciarse en la fotografía circulaba esta mañana por avenida Ragone, frente al mercado Cofruthos, dejando la visibilidad a niveles prácticamente nulos a los quienes ocasionalmente circulaban por allí. Y del daño al medio ambiente, ni hablar. Pero esta, si bien es una postal extrema, no son pocos los vehículos de gran porte: camiones, colectivos y camionetas que circulan por la ciudad de Salta y las principales rutas del Valle de Lerma, dejando a su paso una estela similar a la de los aviones de propulsión a chorro.
Muchos se preguntan: ¿Cómo les permiten circular?, sobre todo teniendo en cuenta que en las principales rutas como las 68, 51, 21 y 26 existen controles de tránsito constantes. Como también los hay en la avenida Paraguay, entre otras arterias. Otro punto que se cuestiona es la forma en que pasan las revisiones técnicas vehiculares.
La situación de grandes vehículos arrojando nubes de humo en los caminos, no solo afecta al ambiente sino que constituye un verdadero peligro a la hora de circular.