“El presidente (Daniel Angelici) le dijo a Román que se quedara tranquilo, que se lustre los botines y que haga de eso que él sabe, jugar al fútbol”. Y aclaró: “Se alargó la duración del vínculo porque vamos a estar en el medio de un torneo. Es una cuestión de razonamiento lógico”.
A medida que se iba acercando el final de la competencia oficial del semestre, y más aún luego de que Boca se despidió de la pelea por el título, prácticamente toda la atención pasó a estar centrada en el futuro de Juan Román Riquelme. La renovación o no de un vínculo que finalizará el 30 de junio del corriente año se convirtió casi en un tema de estado. Recién cuando el xeneize jugó su último encuentro en condición de local (ante Lanús), el enganche dio los primeros indicios acerca de cuál era su intención, al avisar que pretendía jugar al menos cuatro años más y que tendría que decidir si seguiría en el club de sus amores o lo haría con otra camiseta.
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“El presidente (Daniel Angelici) le dijo a Román que se quedara tranquilo, que se lustre los botines y que haga de eso que él sabe, jugar al fútbol”. Y aclaró: “Se alargó la duración del vínculo porque vamos a estar en el medio de un torneo. Es una cuestión de razonamiento lógico”.
A medida que se iba acercando el final de la competencia oficial del semestre, y más aún luego de que Boca se despidió de la pelea por el título, prácticamente toda la atención pasó a estar centrada en el futuro de Juan Román Riquelme. La renovación o no de un vínculo que finalizará el 30 de junio del corriente año se convirtió casi en un tema de estado. Recién cuando el xeneize jugó su último encuentro en condición de local (ante Lanús), el enganche dio los primeros indicios acerca de cuál era su intención, al avisar que pretendía jugar al menos cuatro años más y que tendría que decidir si seguiría en el club de sus amores o lo haría con otra camiseta.
Ante esto, comenzaron las reuniones entre los directivos, que llegaron al acuerdo de ofrecerle renovar su contrato por un año. Sin embargo, al sentarse a dialogar con el representante del 10, Daniel Bolotnicoff, se decidió que lo ideal sería un año y medio. ¿Por qué medio año más? Por dos. El primero es porque a partir de 2015 se implementará el nuevo torneo de 30 equipos que se desarrollará durante todo el año; y el segundo es que ese será el momento en que culmine el mandato de Daniel Angelici al frente de la presidencia.
Mientras toda esta información se filtró de manera extra oficial mientras se aguarda por la respuesta del ídolo, fue el vicepresidente Oscar Moscariello quien lo confirmó: “El ofrecimiento a Román es de un año y medio. Seguramente el primer ofrecimiento de César (Martucci) fue de un año, pero en realidad fue una cuestión verbal. No había ningún problema por un año más, Después cuando hablaron cara a cara (Martucci y Daniel Bolotnicoff) esas cosas se aclararon y se alargó la duración del vínculo por la necesidad de que vamos a estar en el medio de un torneo. Es una cuestión de razonamiento lógico”, reconoció el directivo.
Mientras que no dudó en mostrarse optimista en relación a la decisión que debe tomar el enganche: “La palabra más importante es la que el presidente le dijo a Román ... Que se quedara tranquilo, que se lustre los botines y que haga de eso que él sabe, jugar al fútbol. Con la tranquilidad de que los colores de Boca seguirán vistiendo no sólo su cuerpo, sino su alma”.
“Uno sabe el amor propio que tiene y la confianza sobre sus condiciones futbolísticas. Siempre entra al campo con la cabeza en alto, es ganador. Además, está el contagio que genera en su propios compañeros”, destacó el dirigente. Y culminó: “La verdad que tener que hablar de estas cosas a uno lo pone feliz porque en realidad sabe que tiene en su plantel un jugador que quisieran tener todos”.