Alrededor de 150 alumnos, en su mayoría aborígenes, de la escuela N§4415, de El Galpón, en el departamento de Metán, asisten desde la semana pasada al edificio propio del establecimiento, inaugurado recientemente.
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Alrededor de 150 alumnos, en su mayoría aborígenes, de la escuela N§4415, de El Galpón, en el departamento de Metán, asisten desde la semana pasada al edificio propio del establecimiento, inaugurado recientemente.
La escuela funciona en el barrio San Francisco y tiene una trayectoria de 95 años de peregrinaje por distintos establecimientos del departamento de Metán.
En la zona del pueblo donde se construyó el nuevo establecimiento está asentada la comunidad aborigen Samuel Canaleja, perteneciente a la etnia wichi.
La gran mayoría de sus pobladores se dedica a la pesca artesanal en las cercanías del río Juramento.
Gracias a las gestiones de la Intendencia de El Galpón, los niños wichis podrán asistir a clases, como el resto de los pequeños del lugar, sin tener que recorrer grandes distancias y realizar extenuantes caminatas diarias para asistir a clases.
Las instalaciones
El establecimiento primario tiene salas para niños de 4 y 5 años, cuenta con 9 docentes y la matrícula está compuesta por 150 alumnos, entre aborígenes y criollos.
“El sueño fue largo, pero valió la pena”, dijo la directora del establecimiento, Berta Matorra, al recordar la trayectoria de la escuela que, a lo largo de los años, debió funcionar en los parajes El Ceibal, primero, y luego en Miraflores.
Un sueño cumplido
Durante el acto de inauguración, la directora Berta Matorra agradeció el trabajo realizado para cumplir el deseo de la comunidad educativa.
“Estamos satisfechos con este nuevo lugar, porque refleja lo necesario que es la unión para seguir adelante”, indicó la docente.
El intendente Héctor Romero mencionó las innumerables gestiones que se hicieron para trasladar el establecimiento a El Galpón. “La labor educativa ahora se puede hacer en un lugar en condiciones”, indicó.
Algo de historia
La escuela 4.415 comenzó a funcionar en 1918 y durante 86 años estuvo en la finca Miraflores, en Anta.
Hace tres años se iniciaron las gestiones para trasladar la escuela a El Galpón.
Con una inversión de $1.090.517, la escuela fue construida a través de la Unidad de Coordinación y Ejecución de Proyectos Especiales.