El tradicional Coloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial Argentino (IDEA) es, desde hace casi cinco décadas, uno de los pocos espacios en el que las élites empresarias del país debaten sobre lo que les pasa, el escenario económico que enfrentan y los desafíos que tienen por delante. Son generalmente tres días de reflexión, análisis y búsqueda de consensos, además de acaloradas charlas y debates sobre los más variados temas de la agenda económica y política del país.
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El tradicional Coloquio del Instituto para el Desarrollo Empresarial Argentino (IDEA) es, desde hace casi cinco décadas, uno de los pocos espacios en el que las élites empresarias del país debaten sobre lo que les pasa, el escenario económico que enfrentan y los desafíos que tienen por delante. Son generalmente tres días de reflexión, análisis y búsqueda de consensos, además de acaloradas charlas y debates sobre los más variados temas de la agenda económica y política del país.
Entre el miércoles y el viernes pasado, el Coloquio reunió en Mar del Plata a 900 empresarios y a disertantes de enorme calidad técnica. Más allá de las conclusiones formales, que pueden consultarse en Internet y que guardan las formas diplomáticas que hay que guardar, hay otras conclusiones que surgen del diálogo con innumerables protagonistas del encuentro. Estas son algunas:
- La transición política está en marcha: Aunque las elecciones son el próximo domingo, está claro que el kirchnerismo no tiene posibilidades de obtener un triunfo electoral que le garantice, como hasta ahora, el control del Congreso. Aunque algunos consultores no coincidan con ello, los hombres de negocios creen que los próximos dos años irán definiendo las candidaturas presidenciales para 2015 en un escenario con mucha menos crispación y más debate de ideas políticas. Con el Gobierno en retirada, apuestan a que habrá un candidato de la centroderecha (seguramente Mauricio Macri), uno de la centroizquierda (que se definirá entre el radicalismo y el socialismo) y uno, dos o hasta tres candidatos peronistas (Daniel Scioli, Sergio Massa y algún gobernador del PJ, que podría ser José Luis De la Sota). Y aunque lo nieguen en público, la mayoría de los consultados cree que el gobernador de Buenos Aires es el que tiene las mejores chances para reemplazar a Cristina Kirchner.
- No hay crisis económica en el horizonte: Esto lo piensan no solo la gran mayoría de los empresarios que participaron de IDEA, sino también economistas y consultores. Estos últimos destacaron reiteradamente que pese a la caída de reservas, pese a que los precios de los commodities tienden a bajar en el mundo y pese a la gravedad de la crisis energética, la economía está sólida. No descartaron que pudiera haber eventuales caídas o crisis sectoriales, pero el conjunto de la economía no enfrenta, como muchas veces al final de un ciclo político, riesgos cambiarios, financieros o estructurales. Hubo algunos economistas que fueron incluso más allá y señalaron que hoy el país está creciendo por debajo de su potencial, y que algunas medidas para potenciar la confianza (como blanquear los números del Indec) podrían impactar positivamente en el crecimiento.
- El Gobierno esta haciendo correcciones “positivas” al “modelo”: En los últimos meses hubo “buenas señales” hacia el mercado por parte del Gobierno. Un ejemplo es la aceleración en el ritmo de devaluación del peso frente al dólar, que frenó el deterioro de la competitividad de las exportaciones nacionales. Otro es el acuerdo con las empresas que habían demandado al país ante el CIADI, que permitió destrabar la obtención de créditos del Banco Mundial. Se trata de pequeñas “correcciones” que eran demandadas hace varios años por distintos sectores y que, impuestas por la coyuntura, se están llevando adelante. Debido al enorme costo que los subsidios tienen sobre las cuentas fiscales, para después de las elecciones todos, sin excepción, creen que habrá un aumento de las tarifas del transporte y eléctricas, y que difícilmente esos incrementos puedan trasladarse a los precios.
Un dato interesante: los economistas coinciden en que, fruto del menor ritmo de emisión monetaria (17% este año frente al 40% del año pasado), en agosto y setiembre pasado la inflación creció menos que en los primeros meses del año.
- El escenario social no es tan prometedor: Una de las certezas que surgen del análisis tanto de los economistas como de las encuestas de las que participaron los empresarios es que aunque la economía crezca, no habrá una recuperación del empleo. Por el contrario, muchos hombres de negocios siguen creyendo que esa es la variable de ajuste para mantener la rentabilidad de sus negocios. Ese tema y el incesante crecimiento de la generación ni-ni, los jóvenes que ni estudian ni trabajan, está en la agenda empresaria, aunque hay coincidencia en que las respuestas deben surgir del Estado.
El balance, en definitiva, es positivo para los empresarios y para el país.
La infraestructura, un desafío para el futuro
Mientras hubo coincidencias acerca de un futuro razonablemente equilibrado para la economía, hubo también puntos de contacto entre los panelistas que analizaron el estado de la infraestructura logística del país.
José Barbero, especialista en temas de transporte y logística, consideró necesario replantear el sistema de cargas por camión para derivar el transporte a granel hacia el ferrocarril, ya que “de lo contrario, en los próximos años se va a producir una situación de caos”. Demandó además más inversión en la infraestructura ferroviaria.
El consultor y especialista ferroviario Jorge Kohon (ver entrevista en página 7) coincidió con ese reclamo, aunque admitió que se está avanzando positivamente en la red del Belgrano Cargas. De todas maneras, afirmó que ello es insuficiente.
Ricardo Sánchez, experto de la ONU en materia portuaria advirtió que si en los próximos años no se realizan inversiones en el dragado de puertos fluviales, la Argentina pasará a ser un “actor secundario” en el comercio internacional.
Miguel Salvia, de la Asociación Argentina de Carreteras, planteó por su parte la necesidad de una “modernización en serio” de la red vial. Según reflexionó, hoy “la red está construida con diseños de la décadas del ’70, y las rutas son angostas y muy peligrosas”.