Caro en todo el país, y de mala calidad en Salta y Jujuy por las heladas. El tomate se convirtió en esta semana en un alimento casi de lujo, dejando el lugar privilegiado que tiene en la mayoría de los platos argentinos. En Buenos Aires el kilo se paga entre 30 y 40 pesos, mientras que en los mercados y verdulerías de Salta y Jujuy varía entre 20 y 30 pesos.
Frente al aumento del precio de este fruto, entidades de consumidores lanzaron un boicot, mientras que el Gobierno recomendó utilizar otros alimentos o preparar salsas (blanca o de crema) y ensaladas con otros ingredientes, y adelantó que la situación se normalizará en todo el país en noviembre.
Según informaron en los mercados San Miguel y el Cofruthos, ambos de Salta, la baja del precio y la mejor calidad llegarán por estas tierras dentro de una semana. “Va a bajar el precio cuando comience a salir la producción desde Apolinario Saravia y toda esa zona, porque ahora está llegando el tomate del norte, que se vio afectado por las heladas”, indicaron. En Jujuy también se espera una mejora para entonces.
Ante la disparada en el precio del tomate -el doble de lo que valía hace días-, el representante legal de Consumidores Libres, Héctor Polino, convocó a un “boicot al tomate”, para que los consumidores suspendan la compra de esa hortaliza.
Polino expresó que “frente a esta situación, originada por las heladas en las zonas productoras, y ante actitudes claramente especulativas que se generan en algún eslabón de la cadena de comercialización, convocamos a un boicot”.
El dirigente explicó que esta metodología “se utiliza con mucha frecuencia y de manera exitosa en los países europeos”, por lo cual recomendó “acostumbrarnos a practicarla en nuestro país”.
Según los productores, el tomate atraviesa problemas por cuestiones estacionales en los lugares de cosecha y debido a situaciones climáticas, lo que llevaría otra vez su valor por encima del de la carne vacuna.
Alternativas
La Subsecretaría de Defensa del Consumidor, que encabeza Pimpi Colombo, recomendó “sustituir el tomate en nuestras comidas” y propuso “utilizar otros alimentos para reemplazarlo temporariamente”.
Aconsejó a las amas de casa, por ejemplo, acompañar las pastas, en lugar de salsa de tomate con otras variedades como: salsa blanca, de crema, Parisienne, pesto, estofado al vino o vinagre.
También recomendó preparar ensaladas sin tomate y elaborarlas con lechuga escarola, pepino, aceitunas verdes, huevos y remolacha.
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Caro en todo el país, y de mala calidad en Salta y Jujuy por las heladas. El tomate se convirtió en esta semana en un alimento casi de lujo, dejando el lugar privilegiado que tiene en la mayoría de los platos argentinos. En Buenos Aires el kilo se paga entre 30 y 40 pesos, mientras que en los mercados y verdulerías de Salta y Jujuy varía entre 20 y 30 pesos.
Frente al aumento del precio de este fruto, entidades de consumidores lanzaron un boicot, mientras que el Gobierno recomendó utilizar otros alimentos o preparar salsas (blanca o de crema) y ensaladas con otros ingredientes, y adelantó que la situación se normalizará en todo el país en noviembre.
Según informaron en los mercados San Miguel y el Cofruthos, ambos de Salta, la baja del precio y la mejor calidad llegarán por estas tierras dentro de una semana. “Va a bajar el precio cuando comience a salir la producción desde Apolinario Saravia y toda esa zona, porque ahora está llegando el tomate del norte, que se vio afectado por las heladas”, indicaron. En Jujuy también se espera una mejora para entonces.
Ante la disparada en el precio del tomate -el doble de lo que valía hace días-, el representante legal de Consumidores Libres, Héctor Polino, convocó a un “boicot al tomate”, para que los consumidores suspendan la compra de esa hortaliza.
Polino expresó que “frente a esta situación, originada por las heladas en las zonas productoras, y ante actitudes claramente especulativas que se generan en algún eslabón de la cadena de comercialización, convocamos a un boicot”.
El dirigente explicó que esta metodología “se utiliza con mucha frecuencia y de manera exitosa en los países europeos”, por lo cual recomendó “acostumbrarnos a practicarla en nuestro país”.
Según los productores, el tomate atraviesa problemas por cuestiones estacionales en los lugares de cosecha y debido a situaciones climáticas, lo que llevaría otra vez su valor por encima del de la carne vacuna.
Alternativas
La Subsecretaría de Defensa del Consumidor, que encabeza Pimpi Colombo, recomendó “sustituir el tomate en nuestras comidas” y propuso “utilizar otros alimentos para reemplazarlo temporariamente”.
Aconsejó a las amas de casa, por ejemplo, acompañar las pastas, en lugar de salsa de tomate con otras variedades como: salsa blanca, de crema, Parisienne, pesto, estofado al vino o vinagre.
También recomendó preparar ensaladas sin tomate y elaborarlas con lechuga escarola, pepino, aceitunas verdes, huevos y remolacha.