Habida cuenta los últimos antecedentes magros en materia de seguridad, sobre todo los sucesos acontecidos en Central Norte, la Policía de la Provincia puso el acento en torno a la seguridad del clásico salteño entre el cuervo y Juventud Antoniana, que se disputará el próximo domingo en el estadio Padre Martearena. La primera reunión entre los dirigentes azabaches y la policía se efectuó ayer y se fijó, debido a los últimos incidentes, tanto del cuervo como del santo, un estricto trabajo de inteligencia, por lo que se aplicará otra vez el derecho de admisión, y los violentos que ya fueron identificados no podrán ingresar al estadio.
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Habida cuenta los últimos antecedentes magros en materia de seguridad, sobre todo los sucesos acontecidos en Central Norte, la Policía de la Provincia puso el acento en torno a la seguridad del clásico salteño entre el cuervo y Juventud Antoniana, que se disputará el próximo domingo en el estadio Padre Martearena. La primera reunión entre los dirigentes azabaches y la policía se efectuó ayer y se fijó, debido a los últimos incidentes, tanto del cuervo como del santo, un estricto trabajo de inteligencia, por lo que se aplicará otra vez el derecho de admisión, y los violentos que ya fueron identificados no podrán ingresar al estadio.
José Macaione, presidente de Central, fue contundente con respecto a los 700 efectivos que se dispuso para el operativo de seguridad. “Vamos a realizar todo el esfuerzo necesario para que el partido se desarrolle en forma normal. La policía, por la cantidad de gente que puede concurrir a ver el clásico, planificó el operativo con la mayor cantidad de efectivos posibles. Confiamos en la eficiencia y las garantías que nos dieron”, aclaró. El directivo, al ser consultado sobre un plan por parte de un grupo de hinchas cuervos para generar desorden el domingo, declaró: “No tengo conocimiento. Pero la policía ya está alerta y actuará como corresponde”.
Hoy proseguirá la labor policial, con una nueva reunión con los referentes de las agrupaciones de ambos clubes y los directivos para dar a conocer las instrucciones del caso.
De Giorgi: “Es un clásico, no hay que respetar a nadie”
El buen ánimo y la motivación predominan en los muchachos de Gustavo Coleoni, quienes se aprestan para intentar romper el maleficio en el clásico con Juventud Antoniana y sumar sus primeros tres puntos.
La buena labor que hizo el cuervo en el segundo tiempo con Gimnasia fortaleció la confianza y estimuló los ánimos en el plantel de Central Norte. Carlos De Giorgi, un referente del actual grupo azabache, fue claro y preciso sobre lo que significa el trascendental partido del domingo: “Es un clásico, no hay que respetar a nadie. Si entramos a la cancha con respeto, nos va a ir mal”, le dijo el arquero cuervo a El Tribuno sin titubear.
La mejoría del equipo fue paulatina, pero el panorama sigue siendo complicado y la campaña pésima. Aunque De Giorgi no dudó en destacar el “vaso medio lleno”: “No solo se mejoró en defensa, sino en todas las líneas. Logramos superar la falta de juego que no teníamos al principio. Nunca faltó actitud, pero ahora se muestra más entrega en cada pelota. La defensa está ordenada y solo nos falta la frutilla del postre, que es ganar. Ojalá sea en el clásico”, deseó.
El presente de ambos protagonistas no tendrá incidencia en el clásico, porque, “como dije la semana pasada, antes de enfrentar a Gimnasia, los clásicos son aparte del torneo. Uno puede estar más arriba o más abajo, pero estos partidos se juegan distinto y nadie los quiere perder. El triunfo es el regalo que estamos esperando”, admitió el “uno” azabache.
El mal trago que sufrió el guardavallas por una garrafal falla individual ante Gimnasia quedó atrás para De Giorgi, porque gracias a la confianza del cuerpo técnico y sus compañeros, solo piensa en ganar el clásico y despegar de una vez. Y hasta se animó a anticipar: “Ganamos 1 a 0, con lo justo, eso es demasiado para nosotros”.
Un azabache sin misterios
Gustavo Coleoni tiene todo digitado y definido para confrontar el histórico clásico frente a Juventud Antoniana, su archirrival, al que enfrentará el domingo en el estadio Martearena, desde las 17.15. El técnico cuervo definió que Mario Campos será el remplazante Jorge Medina, quien ayer trabajó en forma difernciada y se ilusionó hasta último momento con jugar su segundo clásico; al final de la jornada expresó: “Estoy mejor de mi lesión, mañana -por hoy- voy a hacer un poco de fútbol para saber como estoy”.
La decisión que adoptó el técnico cordobés es inamovible. Es consciente de que no puede dar ventajas y menos cuando se trata de un clásico trascendental, donde la prioridad y la necesidad es ganar a como dé lugar. Campos, el verdugo de Juventud en la última victoria cuerva, a fines del año pasado, tendrá la complicada labor de hacer pesar su experiencia, porque conoce muy bien el paño.
La otra variante que implementará Coleoni, como anticipó desde el martes, dejando de lado los misterios, será la de Eric Chmil por Cristian Zurita, quien sufrió un microdesgarro en el isquiotibial de la pierna derecha y estará inactivo al menos siete días.
Coleoni pondrá de manifiesto en el ensayo de esta tarde (a puertas abiertas) parte de su estrategia para intentar doblegar al santo y prolongar la racha positiva de más de tres años.