“Por un exceso de acidez en el agua generada por las lluvia, el uso del cloro y la suciedad es que se procedió a desagotar la parte central del balneario”, explicó la directora de Acción Social de la Municipalidad de Salta, Ivette Dousset a El Tribuno. El vaciamiento de un sector del natatorio Carlos Xamena arrancó el domingo y ayer comenzaron a llenarlo nuevamente. Estiman que recién el jueves quedará habilitada esa parte.
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“Por un exceso de acidez en el agua generada por las lluvia, el uso del cloro y la suciedad es que se procedió a desagotar la parte central del balneario”, explicó la directora de Acción Social de la Municipalidad de Salta, Ivette Dousset a El Tribuno. El vaciamiento de un sector del natatorio Carlos Xamena arrancó el domingo y ayer comenzaron a llenarlo nuevamente. Estiman que recién el jueves quedará habilitada esa parte.
El cuidado que los usuarios hacen del balneario más grande de la Provincia, y el cual fue habilitado en buenas condiciones cuando arrancó la temporada, deja en la mayoría de las ocasiones, mucho que desear.
“En esta temporada observamos que la gente está cuidando un poco más la pileta”, manifestó la funcionaria municipal.
Cierto es que la suciedad acumulada desde que abrió la pileta en diciembre del pasado año es sorprendente y es el principal motivo por el que hubo que limpiar el piso de una parte de la pileta.
Desde que abrió a mediados de diciembre pasaron 110.000 personas por el natatorio Carlos Xamena y por día, recibe un cifra cercana a las 8 mil. El camping de este balneario ofreció hospedaje a unas 2.500 carpas y estacionaron 3.000 vehículos. La importancia de este predio para los salteños es considerable dada la magnitud de gente que la utiliza a diario en vacaciones.
El cuidado del agua es un tema delicado, ya que una pileta donde acuden tantas personas es un foco donde las infecciones pueden propagarse rápidamente.