Unas 3.500 familias de Cochabamba, Tarija y Potosí resultaron gravemente damnificadas por las inundaciones provocadas por las torrenciales lluvias registradas en los últimos días en Bolivia, por lo que los respectivos concejos deliberantes declararon en emergencia a diversos municipios.
inicia sesión o regístrate.
Unas 3.500 familias de Cochabamba, Tarija y Potosí resultaron gravemente damnificadas por las inundaciones provocadas por las torrenciales lluvias registradas en los últimos días en Bolivia, por lo que los respectivos concejos deliberantes declararon en emergencia a diversos municipios.
Al mismo tiempo, las autoridades comunales comenzaron a clamar por ayuda al Gobierno nacional, dado que centenares de familias lo perdieron todo.
Los municipios afectados hasta el momento son Capinota en el Valle Bajo y Chimoré en el trópico de Cochabamba; Yunchara y El Puente, zona alta del departamento de Tarija; Tawa, Llica, San Antonio de Esmoruco, San Pablo de Lipez, Mojinete, Tupiza, Vitichi y Cotagaita en Potosí.
Tanto en Capinota como en Chimoré el panorama era desolador debido a que las brigadas de ayuda de la Gobernación y de Defensa Civil confirmaron los desastres ocasionados por las lluvias y los desbordes de los ríos que circundan a las comunidades.
Las cuadrillas de apoyo y auxilio confirmaron en Capinota la presencia de muros caídos, paredes rajadas y en riesgo de ceder si las lluvias continúan, además de numerosos animales domésticos muertos. Esta situación llevó a sus autoridades municipales a declarar la emergencia en la localidad como exige la normativa, para que reciban asistencia de la Gobernación y Defensa Civil. La responsable de la Secretaría de Protección de la Gobernación de Cochabamba, Tatiana Sanabria, confirmó que 30 familias fueron afectadas por las riadas: “Las paredes remojadas amenazan y algunas familias optan por mudarse de habitaciones para evitar tragedias como las ocurridas en pasados años”, manifestó.