Feliciano López volvió a amargar al tenis argentino. El español derrotó a Juan Mónaco por 6-4 y 6-4 en el torneo olímpico que se disputa en Wimbledon y dejó fuera al argentino, que la semana pasada se había instalado por primera vez en el Top Ten de la ATP.
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Feliciano López volvió a amargar al tenis argentino. El español derrotó a Juan Mónaco por 6-4 y 6-4 en el torneo olímpico que se disputa en Wimbledon y dejó fuera al argentino, que la semana pasada se había instalado por primera vez en el Top Ten de la ATP.
Juan Martín Del Potro quedó así como el único representante argentino en carrera. La Torre de Tandil se jugará el miércoles el pase a cuartos de final frente al francés Gilles Simon.
Especialista en canchas rápidas, con sus mejores campañas de Grand Slam en el césped de Wimbledon, López se mostró sólido con el servicio, voleó con criterio, cometió muy pocos errores, aguantó los peloteos desde el fondo y machacó a Mónaco con un revés cortado muy deslizante por la humedad y la lluvia caída.
Sin embargo, fue Mónaco el que empezó dominando el partido con un quiebre en el cuarto game. Con ventaja de 4-2, López encontró la forma de contrarrestar a su rival y recuperó el servicio para igualar el marcador. Con 4-4, Mónaco estrelló tres derechas aparentemente fáciles en la red y López quebró de nuevo, consolidó el servicio y se anotó la manga.
Sólo en el primer parcial, el argentino cometió el doble de errores no forzados que López: ocho contra cuatro.
El español, que parecía encontrarse más cómodo en la pista, mantuvo el dominio en el segundo set. Quebró a Mónaco en el quinto game y mantuvo su servicio hasta el final sin demasiadas complicaciones.
Mónaco se despide del torneo olímpico, en el que partía como noveno preclasificado, en segunda ronda.
Por su parte, López sigue avanzando con paso firme. Se enfrentará al francés Jo-Wilfried Tsonga en tercera ronda. Además, se encuentra en cuartos de final del dobles junto a su compatriota David Ferrer.
López, actualmente en el número 30 de la ATP, fue uno de los protagonistas de la final de la Copa Davis entre Argentina y España del 2008 en Mar del Plata. Contra todo pronóstico, ganó su partido de singles ante Del Potro y le dio otro punto a España en el dobles junto a Fernando Verdasco.
España terminó llevándose aquella Ensaladera de Plata como visitante, en lo que supuso una de las mayores decepciones en la historia del tenis argentino.