Los obispos católicos reiteraron ayer su “preocupación” frente a la reforma del Código Civil que impulsa el Gobierno nacional -con puntos a los que consideran contrarios a la doctrina- y reclamaron un “pronto” acuerdo al conflicto salarial docente.
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Los obispos católicos reiteraron ayer su “preocupación” frente a la reforma del Código Civil que impulsa el Gobierno nacional -con puntos a los que consideran contrarios a la doctrina- y reclamaron un “pronto” acuerdo al conflicto salarial docente.
El vocero episcopal, sacerdote Jorge Oesterheld, dijo ayer que a la Iglesia le interesa aportar a la iniciativa de reforma del Código Civil, que relanzó la presidenta Cristina Fernández ante la Asamblea Legislativa en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso. “Creo que tenemos bastante que aportar. Seguramente preocupación hay por este tema, como siempre las hay sobre cuestiones referidas a la vida y la dignidad de las personas. A la Iglesia le interesa ser escuchada y dar su opinión”, subrayó antes de iniciar las deliberaciones de la comisión permanente del Episcopado argentino, que preside monseñor José María Arancedo.
Entre otras objeciones a la iniciativa oficial, la Iglesia cuestiona puntos referidos a la fecundación in vitro y el descarte de embriones, la “voluntad procreacional” para la determinación de la filiación, el alquiler de vientres, la fecundación post mortem y el divorcio “express”.
Al ser consultado por la prensa en la puerta de la sede episcopal del barrio porteño de Retiro, donde hasta hoy sesionan 22 obispos, el portavoz eclesiástico también se refirió al conflicto docente y al paro convocado por los gremios del sector que reclaman un aumento salarial.
“Siempre la Iglesia destacó la importancia de la educación, por eso esperamos que se solucione para que los chicos tengan tiempo y espacio para educarse”, aseguró.