El Arsenal rozó la hazaña este martes en el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones europea, goleando 3-0 al Milan en Londres, pero los italianos accedieron a la siguiente ronda gracias al 4-0 favorable de la ida en San Siro.
Antes del partido de vuelta, casi todos daban por seguro el pase del campeón italiano a la siguiente fase, pero el partido se les complicó mucho con los goles en la primera parte del francés Laurent Koscielny (minuto 7), el checo Thomas Rosicky (26) y el holandés Robin Van Persie (43 de penal).
Esa ventaja ponía a los Gunners a un tanto de conseguir su objetivo, pero en la segunda el marcador no se movió.
El Milan revivió por momentos sus peores traumas históricos, como los cuartos perdidos en 2004 ante el Deportivo La Coruña español tras ganar 4-1 en la ida o la final de la Champions en Estambul en 2005, donde perdió en penales ante el Liverpool (3-2 tras empate 3-3), después de irse con un 3-0 a favor al descanso.
Finalmente, el líder de la liga italiana consiguió su objetivo y estará entre los ocho mejores del torneo, en el que aspira a un octavo título continental, con el que quedaría a sólo uno del equipo más laureado, el Real Madrid (9).
Por su parte, el Arsenal de Arsene Wenger dice adiós a una de sus posibilidades de salvar una temporada en la que está volviendo a decepcionar y donde sólo ocupa el cuarto puesto, lejos de la pelea por el título nacional.
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El Arsenal rozó la hazaña este martes en el partido de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones europea, goleando 3-0 al Milan en Londres, pero los italianos accedieron a la siguiente ronda gracias al 4-0 favorable de la ida en San Siro.
Antes del partido de vuelta, casi todos daban por seguro el pase del campeón italiano a la siguiente fase, pero el partido se les complicó mucho con los goles en la primera parte del francés Laurent Koscielny (minuto 7), el checo Thomas Rosicky (26) y el holandés Robin Van Persie (43 de penal).
Esa ventaja ponía a los Gunners a un tanto de conseguir su objetivo, pero en la segunda el marcador no se movió.
El Milan revivió por momentos sus peores traumas históricos, como los cuartos perdidos en 2004 ante el Deportivo La Coruña español tras ganar 4-1 en la ida o la final de la Champions en Estambul en 2005, donde perdió en penales ante el Liverpool (3-2 tras empate 3-3), después de irse con un 3-0 a favor al descanso.
Finalmente, el líder de la liga italiana consiguió su objetivo y estará entre los ocho mejores del torneo, en el que aspira a un octavo título continental, con el que quedaría a sólo uno del equipo más laureado, el Real Madrid (9).
Por su parte, el Arsenal de Arsene Wenger dice adiós a una de sus posibilidades de salvar una temporada en la que está volviendo a decepcionar y donde sólo ocupa el cuarto puesto, lejos de la pelea por el título nacional.