Un grupo de encapuchados incendió el domingo dos autobuses en San Pablo, que en los últimos meses enfrentó una fuerte ola de violencia criminal, y dos personas murieron carbonizadas, informó la prensa local.
El primer incendio se registró cerca de las 04h00 cuando la unidad terminaba su recorrido. Con los rostros cubiertos, los vándalos comenzaron a golpear el vehículo con palos y piedras. Luego lo rociaron gasolina y lo prendieron fuego, reportó la Agencia Brasil (estatal).
El conductor, cobrador y algunos pasajeros lograron huir. Dos personas, supuestamente durmiendo por causa de ebriedad, no lograron huir y murieron carbonizadas.Otro autobús fue incendiado poco después sin heridos.
Según el diario O Globo, los ataques se registraron justo después de que dos hombres armados murieran en un enfrentamiento con la policía.
Desde septiembre pasado la ciudad de San Pablo, con 22 millones de habitantes contando su área metropolitana, registró un alarmante aumento de homicidios, muchos de ellos de policías.
La metrópoli es una de las sedes del Mundial de fútbol de 2014.
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Un grupo de encapuchados incendió el domingo dos autobuses en San Pablo, que en los últimos meses enfrentó una fuerte ola de violencia criminal, y dos personas murieron carbonizadas, informó la prensa local.
El primer incendio se registró cerca de las 04h00 cuando la unidad terminaba su recorrido. Con los rostros cubiertos, los vándalos comenzaron a golpear el vehículo con palos y piedras. Luego lo rociaron gasolina y lo prendieron fuego, reportó la Agencia Brasil (estatal).
El conductor, cobrador y algunos pasajeros lograron huir. Dos personas, supuestamente durmiendo por causa de ebriedad, no lograron huir y murieron carbonizadas.Otro autobús fue incendiado poco después sin heridos.
Según el diario O Globo, los ataques se registraron justo después de que dos hombres armados murieran en un enfrentamiento con la policía.
Desde septiembre pasado la ciudad de San Pablo, con 22 millones de habitantes contando su área metropolitana, registró un alarmante aumento de homicidios, muchos de ellos de policías.
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