El terreno donde se levantaron viviendas prefabricadas para personas carenciadas y en emergencia habitacional fue cercado por quienes reclaman la titularidad, la familia Hadad.
inicia sesión o regístrate.
El terreno donde se levantaron viviendas prefabricadas para personas carenciadas y en emergencia habitacional fue cercado por quienes reclaman la titularidad, la familia Hadad.
De las 15 viviendas, cinco quedaron dentro del perímetro que delimita el alambrado como se puede ver en la foto.
Al inicio de esta gestión, el intendente de El Bordo, Rosario Mazzone, invirtió en la compra de 15 casas prefabricadas y las hizo levantar en un lote colindante con tierras pertenecientes a la familia Hadad.
Estas viviendas estaban destinadas a familias cuya situación era desesperante, algunas de ellas con un miembro con discapacidad. Después de tres años y en forma sorpresiva, quizás como una consecuencia de los intentos de usurpación de fines del mes pasado, los hasta ahora supuestos propietarios comenzaron a alambrar el perímetro de las tierras que consideran suyas.
El alambrado pasa a lo largo de 11 viviendas, a solo tres metros de su frente, quedando un largo corredor para acceder a la puerta principal. “No tenemos vereda ni calle, quedamos viviendo en un conventillo, solo podemos llegar caminando, nos sentimos oprimidos, queremos que se busque la forma de que esta familia ceda unos metros de lo que dice son sus tierras, y deje un espacio para una calle”, expresaron los vecinos.
La situación de las otras familias es más complicada debido a que quedaron en el interior del terreno que fue cercado, solo pueden ingresar a sus domicilios sorteando el alambrado: “Parecemos vacas en un corral, no sé qué se puede hacer pero necesitamos una solución urgente”, expresaron los vecinos afectados.
Si bien se está trabajando en busca de una solución, este problema era previsible, “en El Bordo no contamos con terrenos fiscales, estamos rodeados de tierras privadas. Había un remanente en este lugar y, como algunas familias tenían mucha necesidad de viviendas, para darles una solución nosotros compramos las casillas. Pero ése era el único lugar en donde las podíamos construir, yo les expliqué que no iban a tener fondo ni mucho frente y las familias aceptaron por la necesidad; por supuesto no pensábamos que el vecino coloque un alambrado”, explicó el intendente, quien también aclaró que nadie los va a desalojar, “las viviendas son de ellos, nadie los va a correr de ahí”.
Sin una calle para transitar
“El problema que se presenta es que van a carecer de una calle en el frente como sería lo normal en cualquier edificación”, comentó el intendente.
En cuanto a las casillas cercadas por el alambrado, éstas tal vez deban ser reubicadas, “estamos trabajando en una solución que incluya a todos”, finalizó Mazzone.
Cabe acotar que si bien las casillas son de madera, el baño está construido de ladrillos y tiene los correspondientes sanitarios.