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“Cadáveres por todas partes”

La expresión pertenece al vocero gubernamental del este de ese país del norte de África. El paso de la supertormenta Daniel también dejó unas diez mil personas desaparecidas.

Miércoles, 13 de septiembre de 2023 00:28

Libia estaba a punto de desmoronarse por sus luchas internas cuando llegó Daniel, una supertormenta que recorrió el Mediterráneo y sembró la muerte sobre las ciudades y pueblos costeros del norte de África, de ese país árabe, otrora gobernado durante 42 años por el dictador Muhamad Abu-Minyar Gadafi.

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Libia estaba a punto de desmoronarse por sus luchas internas cuando llegó Daniel, una supertormenta que recorrió el Mediterráneo y sembró la muerte sobre las ciudades y pueblos costeros del norte de África, de ese país árabe, otrora gobernado durante 42 años por el dictador Muhamad Abu-Minyar Gadafi.

Un periodista de la agencia de noticias Reuters de camino a Derna, una ciudad costera de unos 125.000 habitantes, vio vehículos volcados en los bordes de las carreteras, árboles derribados y casas abandonadas e inundadas.

El portavoz del Ministerio del Interior del gobierno del este, citado por la prensa, afirmó que "más de 5.200" personas habían perecido en Derna.

"Es muy desastroso. Hay cadáveres por todas partes: en el mar, en los valles, debajo de los edificios", comentó Hichem Abu Chkiouat, ministro de Aviación Civil y miembro del comité de emergencia de la administración que controla el este.

Hay que recordar que Libia está dividida por sus luchas políticas internas. Hay un gobierno para el este y otro para el oeste, donde está la antigua capital Trípoli.

Oficialmente, hasta ayer, se hablaba de 7.000 heridos, mientras que 10.000 personas continúan desaparecidas. Los sobrevivientes caminan las calles destapando las bolsas de los cadáveres para ver si encuentran familiares desaparecidos.

La tormenta hizo reventar dos represas de un río; agua, barro y piedras borraron casi un cuarto de la ciudad de Berna, hasta desembocar en el Mediterráneo.

Usama Ali, portavoz de los servicios de emergencia del gobierno de Trípoli, reconocido internacionalmente, dijo que "la situación en Derna es estremecedora y muy dramática".

La Cruz Roja y las autoridades locales temían unos balances superiores, y advirtieron que las cifras de muertos y desaparecidos iban a subir.

"No tenemos cifras definitivas" por el momento, dijo Tamer Ramadan, de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Ficr), pero "el número de desaparecidos se acerca a los 10.000".

"Las necesidades humanitarias superan con mucho las capacidades de la Media Luna Roja Libia e incluso las del gobierno", explicó Ramadan desde Túnez.

El domingo por la noche, las dos principales represas del río Wadi Derna se rompieron y provocaron riadas de lodo.

Carreteras cortadas, deslizamientos de tierra e inundaciones impedían que los servicios de emergencia llegaran a la población de las zonas afectadas, que tenía que recurrir a medios rudimentarios para recuperar los cadáveres y extraer a los supervivientes de entre el lodo.

Desde el violento terremoto que sacudió la ciudad de Al Marj (este) en 1963, esta es la peor catástrofe natural que azota esta zona del país.

Otras ciudades orientales, entre ellas Bengasi, la segunda ciudad más grande de Libia, también se han visto afectadas por la tormenta Daniel, que se abatió sobre el país tras azotar Grecia.

La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (Ficr) también declaró que el número de víctimas podría alcanzar los miles.

Entre las imágenes que circulan, algunas muestran decenas de cuerpos envueltos en mantas y sábanas, en la plaza principal de Derna, a la espera de ser identificados y ser inhumados en Martouba, un pequeño pueblo a unos 30 km al sureste.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mandó sus "más profundas condolencias" a las víctimas y anunció el envío de fondos y apoyo adicional, según un comunicado de la Casa Blanca.

Convoyes de ayuda desde el oeste del país fueron enviados hacia Derna, mientras el gobierno de Trípoli, dirigido por Abdelhamid Dbeibah, anunció el envío de dos aviones sanitarios y un helicóptero, con 87 médicos, un equipo de socorristas y de investigación, así como técnicos para restablecer la corriente.

El avión de suministros médicos de emergencia transporta 14 toneladas, medicamentos, equipos, bolsas para cadáveres rumbo a Bengasi, declaró el jefe del Gobierno provisional de Unidad Nacional de Libia, Abdulhamid al Dbeibah.

El este de Libia alberga los principales yacimientos y terminales petrolíferas. La Compañía Nacional de Petróleo (NOC) ha declarado el "estado de máxima alerta" y "suspendido los vuelos" entre los centros de producción, donde la actividad se ha reducido drásticamente.

Equipos de rescate de Turquía llegaron al este de Libia, según las autoridades, y la ONU y varios países se ofrecieron a enviar ayuda, entre ellos Argelia, Egipto, Italia, Qatar y Túnez. Francia anunció el envío de personal y de un hospital de campaña.

El embajador de Estados Unidos en Libia, Richard Norland, anunció que la embajada había emitido una "declaración de necesidades humanitarias (que) autorizará la financiación inicial" de su país para suministrar ayuda a los equipos de emergencia, según un mensaje en X (ex-Twitter).

La tormenta Daniel, calificada por los expertos como un fenómeno "extremo en términos de cantidad de agua caída", afectó en los últimos días Grecia, Turquía y Bulgaria, con un saldo de 27 muertos.

 

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