Al consumir una cantidad abundante de alimentos o ingerir algunos muy pesados, suele aparecer la hinchazón abdominal, que es una sensación poco agradable que genera inflamación abdominal y tiende a ocasionar indigestión o pesadez. Es por ello que los expertos en salud aconsejan conocer qué tipo de productos son los que se consumen y cuáles son las cantidades adecuadas.
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Al consumir una cantidad abundante de alimentos o ingerir algunos muy pesados, suele aparecer la hinchazón abdominal, que es una sensación poco agradable que genera inflamación abdominal y tiende a ocasionar indigestión o pesadez. Es por ello que los expertos en salud aconsejan conocer qué tipo de productos son los que se consumen y cuáles son las cantidades adecuadas.
Según Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, la hinchazón es también conocida como distensión abdominal y es provocada -en la mayoría de casos- por comer en exceso. Del mismo modo, este molesto síntoma también puede ser provocado por diversos factores, entre los que se destacan la retención de líquidos, el síndrome de intestino o colon irritable o algún tipo de infección dentro del sistema digestivo.
Para poder determinar la gravedad del síntoma, hay que evaluar con qué frecuencia el paciente presenta inflación en la zona de su vientre. Cuando este síntoma se presenta con frecuencia, por lo general, no quiere decir que haya algo grave detrás del síntoma y más cuando no empeora con el tiempo, desaparece en uno o dos días y, por lo general, surge después de haber ingerido cierto tipo de alimentos.
Por lo anterior, la doctora Jacqueline Wolf, profesora asociada de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard y gastroenteróloga en el Centro Médico Israel de Boston, señala que el consumo de ciertos alimentos son los responsables de los problemas digestivos como la hinchazón. De hecho, en una investigación, publicada por la CNBC y desarrollada junto a su compañera, la también doctora Judy Nee, aconsejan evitar el consumo de estos alimentos:
Alimentos edulcorados
De acuerdo con información del estudio en mención, la mala absorción de la fructosa normalmente afecta a un 50 % de la población y es por ello que la experta aconseja “evitar los alimentos endulzados con jarabe de maíz alto en fructosa como los dulces, los panes envasados, la fruta envasada, lácteos endulzados como el yogur, salsas como el kétchup, refrescos o zumos”.
Verduras
A pesar de que son un alimento muy saludable, algunas de ellas pueden ser las causantes de la hinchazón, especialmente si tienen fructanos y galactanos, dos hidratos de carbono complejos que no se pueden digerir en el intestino delgado y son descompuestos por bacterias intestinales. Por ello, Wolf recomienda evitar verduras como los espárragos, el calabacín, las cebollas, las alcachofas, las coles de Bruselas y los puerros.
Leche y derivados
De acuerdo con la experta de Harvard, cerca del 68 % de la población digiere mal la lactosa, por lo que aconseja elegir opciones sin lactosa y más cuando se tiene alguna patología gastrointestinal.
Legumbres
Entre los superalimentos que pueden causar no solo hinchazón abdominal, sino también acumulación de gases están las lentejas, los guisantes o los frijoles, los cuales contienen rafinosa, un tipo de azúcar que el cuerpo puede tener dificultad para descomponer. Por otra parte, al ser ricos en fibra y su consumo puede aumentar la excesiva producción de gases intestinales.
Alimentos fermentados
De acuerdo con la doctora en mención, algunos alimentos fermentados pueden fortalecer la microbioma intestinal, sin embargo, otros pueden ser causa de hinchazón y gases. Frente a esto, la experta recomienda “limitar la ingesta de kimchi, kombucha y chucrut para un estómago más saludable”.
Cereales
El estudio mencionado destaca que los alimentos que contienen gluten pueden causar hinchazón en las personas con intolerancia. De esta manera se recomienda evitar el trigo, la cebada y el centeno. “Coma alimentos que sean menos agresivos para el intestino como arroz, quinoa, avena y otros productos sin gluten”, señala Wolf.
Frutas ricas en fructosa
La experta recomienda limitar el consumo de frutas dulces como manzanas, sandía, uvas, pomelo, ciruelas, plátanos maduros o ciruelas pasas, dado que son abundantes en fructosa. En su lugar, es mejor consumir otras frutas como las moras, arándanos, fresas, piña o mandarinas.