Muchos son los jujeños que acceden a equipos de GNC para alivianar gastos en combustible, que dicho sea de paso, aumentan escalonadamente mes a mes.
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Muchos son los jujeños que acceden a equipos de GNC para alivianar gastos en combustible, que dicho sea de paso, aumentan escalonadamente mes a mes.
Ante esta situación se detectó que cada vez son más los talleres que se dedican a este rubro, pero lo que llama la atención es que el número supera ampliamente a los que el Enargas tiene registrados como habilitados, que son trece.
Por ello, no solo advierten sobre la constante proliferación sino también sobre los riesgos y perjuicios que corre el cliente, motivo por el cual se hicieron las denuncias correspondientes.
"Así como crece este mercado paralelo, aumenta también la cantidad de personas estafadas. Y también está el caso de otras que en la desesperación por hacer costos más económicos se meten en esos talleres", explicó la titular de un taller ubicado sobre avenida El Éxodo de la capital jujeña.
Graficó que las estafas quedan a la vista cuando una persona compra un auto usado y, al momento de renovar, la oblea se acerca a un taller habilitado y se da con que dicha oblea pertenece a otro auto o bien es apócrifa, lo que significa que ese equipo de gas nunca estuvo cargado en el sistema de Enargas y la única manera de regularizar su situación es instalando un equipo nuevo cumpliendo con todas las reglas.
Asimismo, advirtió que uno de los riesgos que corre el usuario al concurrir a los talleres no habilitados es no recibir respuesta ante una falla, pérdida o componente dañado. A diferencia de uno oficial que repara la pieza o bien la cambia de fábrica. También corren el riesgo de que el cilindro no haya pasado por una prueba hidráulica que controla la ausencia o presencia de fisuras garantizando que el mismo resista los 200 Bar, que es la presión que recibe al momento de cargar GNC en una estación de servicio.
Talleres habilitados
Un taller para estar dentro del registro oficial debe estar habilitado por la resolución NAG E 408 y constar con el certificado habilitante que se obtiene tras presentar documentación específica, capacitaciones y contar con un seguro de caución y civil que respalda tanto al taller como a los autos que les colocan los equipos.
La lista de los talleres de montaje certificados según la resolución NAG E 408 se encuentra publicada en https://www.enargas.gob.ar/ y son trece en toda la provincia: en San Salvador de Jujuy hay 4, en calle Ledesma Nº935, en Las Heras Nº1299, Uriondo Nº564, avenida Éxodo Nº470 y Puna Oeste Nº19.
En San Pedro hay 2, uno en calle El Salvador Nº5 y en Uruguay esquina Perú. En Libertador General San Martín, también se registran 2 ubicados en avenida Hipólito Yrigoyen mnz 14 y en Tilcara Nº42.
Y los que tienen sólo un taller habilitado son El Carmen en Coronel Arena Nº705, Palpalá en avenida Hipólito Yrigoyen Nº699, en Perico sobre avenida La Bandera Nº162/174 y en San Antonio en calle Hermanas Perovic Nº72.
Cabe aclarar que el sitio oficial advierte: "Estos datos son los que posee el Enargas a partir de la información suministrada por los sujetos del sistema vigente, por lo tanto, se debe contemplar la posibilidad de que existan inconsistencias".
Aumento de precios
Respecto a la demanda, la propietaria del taller dijo que "se nota que las personas necesitan economizar con el GNC, pero no llegan con el monto para comprarlo ni para costear su mantenimiento. Es que hacer una renovación de oblea, prueba hidráulica y la válvula reglamentaria por disposición del Enargas tiene un costo de $55.000" cuando hasta antes del 12 de junio costaba $45.000.
En el mes de marzo, un equipo de GNC de quinta generación costaba desde $140.000, en junio se aplicó una suba que elevó el precio a $200.000 y a partir del 1 de julio sufrió otro aumento del 15%, dicha suba se aplica también al kit de instalación y a los repuestos.
Y es por este constante encarecimiento que la demanda de equipos se mantuvo estable últimamente. "Ya no hay un parque automotor que demande como hace diez años", concluyó.
Comercialización de obleas apócrifas
Otro mercado paralelo es el de las obleas apócrifas, motivo por el cual ya se hicieron las denuncias correspondientes a la Brigada de Investigaciones de la provincia. La titular de un taller habilitado explicó que todas las obleas pueden ser escaneadas para comprobar que sean auténticas y que correspondan al auto en el que están pegadas. Si la oblea está en regla, sale “sin observación” y los datos coinciden con el auto al que pertenece, se puede ver la fecha y quien renovó la misma y los componentes de GNC que tiene.
Y en el caso de las apócrifas, sale “el código leído no corresponde”, si está vencida sale “con observación” o bien ni siquiera llega a poder escanearse. Otra forma de identificarlas es que, a diferencia de una oficial, las falsas pueden despegarse fácilmente como una calcomanía, se despintan ante la exposición al sol y algunas repiten la terminación del número de serie. Actualmente en los talleres se detectan muchas personas circulando con este tipo de obleas. Algunos las utilizan de buena fe y otros buscando abaratar costos aunque la diferencia no es mucha. Las mismas se comercializan a través de las redes sociales. Lo que también sucede es que en el mercado del usado se detectaron autos con obleas que pertenecieron a otros autos y para esos casos la única manera de regularizar la situación es instalando un equipo nuevo.