San Pedro de Jujuy vivió ayer una jornada de intensa lluvia y descargas eléctricas que dejaron al descubierto, nuevamente, todas las falencias que tiene la ciudad cuando llegan las tormentas del Ramal.
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San Pedro de Jujuy vivió ayer una jornada de intensa lluvia y descargas eléctricas que dejaron al descubierto, nuevamente, todas las falencias que tiene la ciudad cuando llegan las tormentas del Ramal.
Ya desde la madrugada, las calles céntricas y los barrios comenzaron a inundarse, mucho más en los sectores donde los desagües están obstruidos con basura y botellas de plástico, lo que trajo aparejado el anegamiento en todo el casco céntrico, avenidas e ingresos a los principales barrios sampedreños.
Otro de los eternos problemas es la falta de remises. Cada vez que llueve, los vehículos del transporte alternativo de pasajeros parecen desaparecer. Cientos de estudiantes y trabajadores estuvieron varados en las esquinas, refugiados en algún techo y con sus paraguas, esperando que pase algún remís. La espera fue interminable, más de 1 hora sometidos a las inclemencias del tiempo y sin solución alguna. Gran parte faltó a la escuela y a su trabajo, debiendo buscar la forma de justificar el día.
La infraestructura escolar y los edificios públicos también fueron parte de los afectados por la fuerte tormenta que se instaló en San Pedro. Uno de esos casos fue el de la escuela 201 "Salvador Canuto Martínez" que debió suspender el dictado de clases durante el turno mañana y además los festejos por el aniversario de la institución. A esta se suman otras instituciones que presentan desde goteras en los techos, filtraciones en sus paredes, problemas con las instalaciones eléctricas, ventanas rotas, aulas inundadas y una lista interminable de inconvenientes históricos.
Las dependencias municipales que funcionan en el predio del mercado municipal, también sufren de goteras permanentes, por lo que se debe recurrir a colocar baldes para acumular el agua y evitar que se moje todo.
El clásico de las lluvias en la "Perla del Ramal" es el día después donde se ve reflejado el estado de las calles. En los barrios el barro gana lugar y hace intransitables sectores como la Nueva Ciudad y los barrios como 4 de Diciembre, Tupac, Eva Perón, Soledad y Néstor Kirchner. En el centro las calles quedan lavadas y comienzan a aparecer los enormes pozos que las adornan. Cráteres en algunos casos, como la calle Gorriti Y Walterio Leach donde ya es imposible transitar.
Si bien la lluvia representa un alivio para muchos sampedreños, las consecuencias que la misma deja en la ciudad exigen mayor atención de las autoridades para atenuar los efectos de un clima hostil que acompañará gran parte del otoño.