Desde este sábado la comediante salteña Graciela Quipildor, conocida artísticamente como "La Quipi", brindará un taller intensivo de escritura e interpretación de monólogos de humor en el centro cultural "Casa Museo Macedonio Graz".
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Desde este sábado la comediante salteña Graciela Quipildor, conocida artísticamente como "La Quipi", brindará un taller intensivo de escritura e interpretación de monólogos de humor en el centro cultural "Casa Museo Macedonio Graz".
Serán cinco clases grupales presenciales y dos encuentros virtuales individuales con la instructora, para trabajar el pulido del material; un ensayo general y al final, una muestra en un bar de la ciudad. El horario de los encuentros será de 9.30 a 12.30.
Quipildor hace más de diez años que se topó con el humor, faceta que le surgió producto de una resiliencia, en una etapa en la que el mundo parecía estar en su contra. Divorciada y con una sucesión de hechos contradictorios, encontró en la red social Facebook un refugio para escribir lo que le pasaba, expresarlo y soltarlo.
Lo que volcaba allí, aunque penoso, tenía matices humorísticos y fue así que alguien le pidió que "haga stand up" y a ese pedido se sumaron cientos de voluntades.
La salteña aún desconocía de qué se trataba el género. Investigó y se llevó una agradable sorpresa, "me doy con que era gente haciendo lo que yo hacía escribiendo, pero en un escenario", expresó.
Tomó conciencia de que, si le atraía, debía prepararse. Entonces, hizo un taller intensivo con el grupo Señales de Humor, un grupo de Buenos Aires que formó grandes comediantes en el país.
Con ellos, le pudo dar forma y técnica a lo que hacía, hasta entonces, intuitivamente. Luego formó un grupo de comedia con dos comediantes más; ellos dejaron la comedia, volvieron a sus trabajos "serios" y "La Quipi", quedó sola haciendo comedia.
Una vertiginosa carrera la estaba esperando. Bares, teatros, Buenos Aires, "Bendita TV", "Hora de Reír", radios locales, medios gráficos, televisión, redes sociales; todos demandaban su humor (aún continúa esa seguidilla, pero de forma más ordenada y selectiva).
Ocho años después, tiene el deseo de compartir su experiencia con todos aquellos que tengan algo para decir.
"La idea es aprender una técnica que nos permita hablar de lo que queramos, adaptar cualquier tema, sabiendo que es lo que hace reír; hay una fórmula para eso. Cuando sabemos que funciona, podemos poder un remate en todas las líneas que escribamos. Esa estructura nos da un rango de efectividad que está bueno", manifestó la comediante.
Para finalizar Graciela Quipildor, "La Quipi", expresó que "si hay algo que me da material para la comedia es mi vida sentimental. Es más, el día que tenga éxito en el amor, dejo la comedia. Siempre digo, la gente feliz, no sé si pueda hacer reír. Si para vos el mundo está en orden y todo está como debe estar, no encontrás el drama suficiente para sacar la comedia. Para la comedia tiene que haber algo que no te cierra, que no te sale, que lo encontrás absurdo, que te molesta, que te enoja, que te duele, si no tenés eso, no hay comedia. Cualquier chiste surge de algo que nos llamó la atención. Si todo es amor y paz, difícilmente puedas hacer reír; la que lo logra es la más expuesta, la que más problemas tiene, por eso, tengo comedia para rato".