El mundo giró radicalmente para Sofía Jujuy Jiménez, dado que en un santiamén se le desplomó su historia de amor con Bautista Bello, dado que recibió pruebas irrefutables de una multiplicidad de infidelidades, lo que la sumió en un durísimo trance.
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El mundo giró radicalmente para Sofía Jujuy Jiménez, dado que en un santiamén se le desplomó su historia de amor con Bautista Bello, dado que recibió pruebas irrefutables de una multiplicidad de infidelidades, lo que la sumió en un durísimo trance.
La modelo explicó en varias ocasiones cómo descubrió al polista en pleno acto de entrelazamiento con otras mujeres, a raíz del envío de videos de boliches en Brasil, en los que se percibía con nitidez los engaños. Una problemática que detonó el fin de la pareja.
Todo eso regresó para Jujuy en su visita a La última cena, el ciclo que acaba de estrenar Alejandro Fantino en la pantalla de El Nueve y que se emite los sábados a la noche con un formato peculiar, ya que consta de cenar con famosos y hablar en cámara.
En ese entorno, Alejandro fue al hueso y le preguntó: “¿Sofi en que andás? ¿Estás solita?”. Ante lo cual, Sofía respondió: “Siempre creí en eso del amor para toda la vida, soy una fanática del amor. Me encanta el amor, estar enamorada, compartir con el otro”.
El conductor aceleró a fondo y le propuso un campo hipotético, que también refiere a su pareja con el Pelado López: “¿Qué tipos de hombres te gustan? ¿Saldrías con uno de 50 años?”. Visiblemente incómoda, Jiménez contó: “Pasé por todas las opciones. Salí con uno que me duplicó la edad”.
Y luego añadió más argumentos de su determinación de evitar ese tipo de diferencia de edad: “No, con todo el respeto, no. Siento que mi primera etapa de tener un novio que me duplicaba la edad fue muy fuerte para mí, fue hasta traumática”.
Fantino insistió una y otra vez y le transmitió su pensamiento de los maduros: “Pero Sofi, son los mejores. Están de vuelta en la vida, piensan. Tipo del interior, de 50 y pico, son el prototipo de perfección”. Así, la morocha aseguró: “Tuve uno más grande, tuve uno más chico, pero me gusta seguir creyendo en el amor. Que no tenga que ser uno solo tampoco”.