Estudiantes de la Tecnicatura en Tecnologías en Alimentos en el Instituto de Educación Superior (IES) de Yuto experimentan produciendo harina de bananas y preparados que idearon para aprovechar la fruta de la zona que se descarta y crear un alimento apto para celíacos. Lo expusieron ante la coordinadora del Programa Valor Agregado Agroindustria y Bioenergía del Inta, Adriana Descalzo, quien brindará asistencia y vio potencial en el proyecto.
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Estudiantes de la Tecnicatura en Tecnologías en Alimentos en el Instituto de Educación Superior (IES) de Yuto experimentan produciendo harina de bananas y preparados que idearon para aprovechar la fruta de la zona que se descarta y crear un alimento apto para celíacos. Lo expusieron ante la coordinadora del Programa Valor Agregado Agroindustria y Bioenergía del Inta, Adriana Descalzo, quien brindará asistencia y vio potencial en el proyecto.
"La idea inició para darle valor a los productos de la zona", explicó Romina Benítez, una de las alumnas del IES quien detalló que decidieron trabajar partiendo de la banana verde, una vez que termina su etapa de crecimiento y antes de que empiece a desarrollar los azúcares.
Apuntan a que esta harina de banana sea alternativa de aprovechamiento de la producción local, y al mismo tiempo sea una posibilidad de formular alimentos para celiacos.
El proceso fue artesanal, los estudiantes se dividieron en grupos, segundo y tercer año de la carrera, y uno de ellos sometió a la banana a un proceso de desecado al sol, es decir en forma natural, mientras otro optó por hacer deshidratado en horno; y el resultado fue el polvo, la harina.
Las harinas tienen un tamaño de 150 micrones la partícula, las más grandes las usaron como rebozador, hicieron milanesas, albóndigas y un budín de pan; además de experimentar con snacks, pan y usaron maracuyá para sumar. "Pudimos realizar distintos tipos de productos para que puedan consumir personas con celiaquía, y los que no puedan consumir carbohidratos que pueda afectar su salud", dijo la estudiante destacando el nicho al que apuntan desde su desarrollo.
PROCESO | DE LAS BANANAS VERDES, ANTES DE QUE DESARROLLEN SUS AZÚCARES.
Además están contactando con el Instituto Nacional de Alimentos para tratar de gestionar que se incorpore una nueva normativa en el Código Alimentario Argentino, que menciona que no se pueden ocupar frutas pequeñas ni picadas, de modo que lo puedan afrontar como una pyme.
Aclaró que la idea es aprovecharlas, y en este caso hicieron uso de las bananas con que cuenta el cultivo experimental bajo cubierta en la Estación Experimental del Inta, y la idea para hacer el emprendimiento es ocupar las bananas que terminan siendo descartadas debido a que no las comercializan por su pequeño tamaño. Si bien la cáscara en otros países la utilizan como tocino vegetariano, por el momento desechan la cáscara.
Encabeza el proyecto Claudio Ortiz, coordinador de la Tecnicatura en Tecnologías en Alimentos en el Instituto de Educación Superior (IES) de Yuto y quien se desempeña en el área de Fitopatología del cultivo del banano en dicha experimental del Inta, por lo que al recorrer los campos de Salta y Jujuy, encontró que en cultivo del banano hay casi 3.000 hectáreas.
"Todavía lo estamos desarrollando, prueba y error porque hay que ir ajustando ciertas técnicas ya que en Libertador tenemos temperaturas altas. Tenemos que aprovechar en época seca y baja humedad relativa para hacer los deshidratados", explicó Ortiz. Acotó que como docente de la Tecnicatura, hicieron prácticas profesionalizantes con las que iniciaron el proyecto a inicios de este año con jóvenes de segundo año, y continúan con otros de tercer año. Les queda pendiente hacer la investigación sobre propiedades físico químicas de harinas propiamente dichas.
Recientemente en la sede de la experimental de Inta Yuto los estudiantes pudieron exponer los avances de este proyecto ante la coordinadora del Programa Valor Agregado Agroindustria y Bioenergía del Inta, Adriana María Descalzo, doctora en Biología; quien llegó para conocer y coordinar líneas de investigación relacionadas al agregado de valor de las frutas tropicales. Llegó acompañada por técnicos del Instituto de Tecnología de Alimentos (ITA) y técnicos de la EEA Balcarce y de Salta.
"La idea de la visita fue poder ir a intercambiar con los investigadores de Yuto la posibilidad de agregar valor a productos de tropicales y residuos del cultivo de frutos tropicales. Fuimos con un equipo del Programa de Valor Agregado, Agroindustria y Bioenergía del Inta, un equipo de investigadores, éramos seis personas para poder intercambiar y hacer una visita in situ al lugar donde están los cultivos y laboratorios", explicó Descalzo.
En cuanto a los productos de banana que están desarrollando los estudiantes de Yuto la bióloga destacó que "son espectaculares" y consideró que les ve potencial que se debe explotar.
Prevén desarrollo
Ortiz precisó que plantearon desde las Tecnicaturas hacerlo como pymes, trabajando con la asistencia de la coordinadora del Programa Valor Agregado Agroindustria y Bioenergía del Inta, Adriana Descalzo, a quien le presentaron el proyecto de harina de banana, quien brindará un gran impulso para seguir trabajando, de modo que no quede en un proyecto de aula. El siguiente plazo será hablar con productores, para que les faciliten la fruta que no comercialicen, gestiones con Inal y luego con Senasa, para darle salida laboral. La idea es trabajar con esas dos cohortes de Ledesma, de modo de empezar este trabajo.
Por otro lado, cuentan con otro trabajo, el pasteurizado de maracuyá para no perder las propiedades de la pulpa, que integraron al elaborar productos con harina de banana en tartas con ese relleno de la fruta.