Autoridades del Ministerio de Producción de la Provincia se hicieron presentes recientemente en la localidad de Palma Sola con el objetivo de brindar ayuda y ejecutar trabajo para paliar la situación de emergencia que atraviesa el sector productivo como consecuencia de la sequía.
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Autoridades del Ministerio de Producción de la Provincia se hicieron presentes recientemente en la localidad de Palma Sola con el objetivo de brindar ayuda y ejecutar trabajo para paliar la situación de emergencia que atraviesa el sector productivo como consecuencia de la sequía.
La reunión realizada entre los productores, las autoridades provinciales y el intendente Fernando Agüero tuvo lugar en el consorcio de riego Arroyo Santa Rita, donde una vez más los agricultores exclamaron su desesperación por la falta de agua.
Las autoridades manifestaron que iban a trabajar en forma conjunta con el compromiso de dar una solución inmediata. Por lo pronto mencionaron el revestimiento de los canales de riego que será con membranas y plásticos para salir del paso a la emergencia; coordinando con las instituciones e organizaciones sociales. La idea es trabajar con la limpieza de los canales, acondicionarlos, para que al momento de que llegue la tan ansiada lluvia pueda correr el agua libremente. Luego, a través de proyectos, seguirá la perforación de pozos y demás.
Para salir del paso podrán en condiciones los canales de riego, esperando contar con el trabajo solidario en forma conjunta entre el Ministerio, Municipio y productores.
El Gobierno aportará maquinaria, cemento, membranas, plásticos y todo para el acondicionamiento de los canales que brindará las herramientas necesarias. Además, se contemplará el relevamiento de los productores para conocer los estados en que se encuentran los canales que en muchos casos están totalmente destruidos y es por donde más se pierde la poca agua que hay, afectando al productor de las zonas más alejadas. El compromiso es empezar la semana que viene con los trabajos.
Las lluvias se hacen esperar, si bien llovió, no es lo suficiente para que aumente el caudal del arroyo Santa Rita, principal fuente de agua para la población. El año pasado la producción sufrió la sequía más grande, los frutos escasearon por la zona, la plantación de hortalizas fue inútil.
Por el momento solo se espera el milagro de la lluvia y con ella un alivio para los agricultores y ganaderos de la localidad, como también para toda la población de la zona de las Yungas que en la época de cosecha era el boom para quienes apostaban a la tierra como todos los años y esta vez sólo se ve la desolación de los campos secos por la falta de agua.