El médico veterinario jujeño Raúl Marín obtuvo un nuevo reconocimiento nacional, la incorporación a la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria luego de obtener varios premios. Obtuvo varias becas, se especializó y tiene amplia trayectoria en el sector privado desde donde transfirió sus conocimientos en el sector público, y sigue siendo docente de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju).
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El médico veterinario jujeño Raúl Marín obtuvo un nuevo reconocimiento nacional, la incorporación a la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria luego de obtener varios premios. Obtuvo varias becas, se especializó y tiene amplia trayectoria en el sector privado desde donde transfirió sus conocimientos en el sector público, y sigue siendo docente de la Universidad Nacional de Jujuy (Unju).
"Es un gran orgullo inesperado, pero obviamente lo disfruto como eso, un reconocimiento a la forma de trabajo y los logros", explicó el médico veterinario Raúl Marín. Se trata de la incorporación a la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria, un organismo de prestigio académico, y supone un premio más simbólico que los anteriores en reconocimiento a su trayectoria.
Se sumará a la prestigiosa academia junto a su comprovinciano Bernardo Carrillo de 92 años, quien será el padrino de su incorporación. Marín ya fue premiado en varias ocasiones por la academia en 2011, 2014 y 2017, y todos con base en su trabajo y experiencias exitosas en la región. "Presenté trabajos que demostraban que en el NOA la actividad bovina tenía muchas particularidades y que podía lograr un rinde muy por encima del promedio que se obtiene", explicó al respecto.
El último fue Biogénesis Bagó de innovación tecnológica, producto de la aplicación de mucho conocimiento que tuvo que lograr en la zona, de particularidades sanitarias que resultan limitantes productivas y comprobó que se puede lograr poner los sistemas productivos en otro nivel.
Precisó que estabilizar sanitariamente permite que haya mucha fertilidad para poder colocar la genética y que tenga el impacto que necesita. Estimó que cuando logra una metodología de trabajo que se puede reproducir, se debería conseguir los mismos resultados, "es cuando uno aporta a la región no solamente a Jujuy", agregó.
Sostuvo que trabajó en patología y reproducción animal tocando todas las especies: caprino, equino y principalmente bovinos, por lo que aseguró que es una actividad transversal a todas las especies. Mañana, durante el acto de incorporación, que se hará en la Facultad de Ciencias Agrarias de la Unju, a las 18, prevé dar una charla sobre sanidad centrándose en las cosas que son limitantes en todas las especies, inclusive llamas, que afectan a diferentes zonas del NOA.
Recordó que profundizó su trabajo en ganadería bovina, con algunas razas específicas, pero independientemente de ello lo destacable es que logró trabajar en cantidad de enfermedades que antes se desconocían y a partir de allí se originen medidas preventivas que redunden en un mayor efecto productivo. "La reproducción, una vez que uno logra esa estabilización, es lograr que las especies tengan mayor índice de procreo de producción primaria que mantiene el sistema productivo", precisó.
Marín se graduó en la Facultad de Veterinaria de La Plata y egresó en 1987, fue becado por Inta, Secter, la Agencia de Cooperación Internacional de Japón y se especializó en salud animal con orientación en patología diagnóstica y fisiopatología, hizo pasantías en Japón, Brasil y Estados Unidos, y se doctoró. Es autor de 3 libros y 43 publicaciones científicas en revistas nacionales e internacionales. Actualmente es asesor privado y desde 2013 es docente adjunto de la cátedra de Producción Animal 1 de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Jujuy. Fue director de Desarrollo Ganadero en 2013 y 2014 y presidente de la Asociación Argentina de Veterinarios de Laboratorios de Diagnóstico, entre otros. (Liliana Alfaro)