En una ceremonia que se realizó ayer, asumieron como jueces del Superior Tribunal de Justicia los abogados Mariano Gabriel Miranda, María Eugenia Nieva y Martín Francisco Llamas; y como defensora general y defensor general adjunto del Ministerio Público de la Defensa Civil, Olga Ivacevich y Guido Matías Luna, respectivamente.
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En una ceremonia que se realizó ayer, asumieron como jueces del Superior Tribunal de Justicia los abogados Mariano Gabriel Miranda, María Eugenia Nieva y Martín Francisco Llamas; y como defensora general y defensor general adjunto del Ministerio Público de la Defensa Civil, Olga Ivacevich y Guido Matías Luna, respectivamente.
El acto fue encabezado por los jueces del Alto Tribunal, Federico Otaola (presidente), Sergio Jenefes (juez suplente de Presidencia), José Manuel del Campo, Laura Lamas González y Ekel Meyer; y contó con la presencia del fiscal general del Superior Tribunal de Justicia, Alejandro Ficoseco; la fiscal general adjunto, Aída Elena Dajer; el fiscal general del Ministerio Público de la Acusación, Sergio Lello Sánchez; legisladores nacionales, provinciales y municipales; los presidentes del Colegio de Magistrados y Funcionarios y del Colegio de Abogados y Procuradores de Jujuy; jueces, funcionarios y empleados judiciales; autoridades de la Asociación Judicial e invitados especiales.
Luego de tomar juramento y posesionar en el cargo a los nuevos magistrados, el juez Otaola hizo uso de la palabra expresando su satisfacción por completar el funcionamiento pleno del STJ.
Más adelante se refirió al funcionamiento del Poder Judicial, destacando el trabajo que se realizó durante la pandemia, el cual fue satisfactorio, dijo, con el sacrificio de todos y cada uno de sus miembros.
En ese sentido enfatizó que el Poder Judicial está embarcado en sostener institucionalmente a la Provincia desde su función, y para ello se han encarado diferentes tareas que implican modernizarlo.
Entre ellas citó la ampliación del número de fueros; la ampliación del servicio de justicia en toda la provincia mediante la apertura de los Centros Judiciales en Libertador General San Martín y Perico, y próximamente en Humahuaca y La Quiaca; la despapelización de los expedientes a través de la informatización, que ya prácticamente alcanza a todo del Poder Judicial; y la puesta en marcha del sistema adversarial con un nuevo Código de Procedimiento Penal.
Por último, el magistrado manifestó que el Poder Judicial "es una garantía de la paz social, es un piso de seguridad que le damos a nuestro pueblo. Somos también un pilar de la autonomía provincial. Autonomía e independencia que vamos a defender", puntualizó Otaola, y destacó que en esta tarea el Colegio de Magistrados y Funcionarios trabaja estrechamente con el Superior Tribunal de Justicia.