"Negras Nuestras" del colectivo Xuxuy Banto, es una obra de danza inspirada en el libro "Negra Muerta" de Maria Laura Lerma, que se presentó de una manera muy integradora el año pasado. Su derivada puesta de danza verá la luz hoy a las 20 en el Centro Cultural Sariri de la ciudad de Humahuaca (Arias esquinas Patagonia).
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"Negras Nuestras" del colectivo Xuxuy Banto, es una obra de danza inspirada en el libro "Negra Muerta" de Maria Laura Lerma, que se presentó de una manera muy integradora el año pasado. Su derivada puesta de danza verá la luz hoy a las 20 en el Centro Cultural Sariri de la ciudad de Humahuaca (Arias esquinas Patagonia).
El arte y la fuerza de las mujeres, las disidencias, la identidad y las culturas respetadas, hilaron para llegar hoy a la presentación de esta performance que Mariela Cazón, una de las bailarinas intérpretes, define como "un estadío de un proceso creativo". Quizás por eso no es atinado hablar de un estreno, la puesta claramente seguirá evolucionando, y en ese sentido tendrá varios estrenos, o más "estadíos" que mostrar.
Es que el espíritu de esta entrega y de los artistas que se suman es el de lo colectivo, sentido, apropiado, corporizado, para fusionar y universalizar en una muestra de profundo contenido.
El libro es una novela a partir de relatos, que se propone recuperar la historia e identidad de los pueblos durante las luchas independentistas. Su autora, es además una de las bailarinas de la obra, y parte de Xuxuy Banto. El año pasado la presentación de la obra literaria se pensó como un espectáculo de danza, música y con un espíritu diferente, que coordinó desde el entrenamiento en ritmos afro, Verónica Navarro.
Lo cierto es que hoy la propuesta es muy diferente, esta vez el foco está puesto en la danza y en un vuelo diferente del significado histórico del éxodo que se reflejaba en el libro, hacia "un éxodo propio", explica Cazón.
"Trabajamos alrededor de una idea, la de los aires afro e indios que nos unen y unen a las culturas, y que nos descolonizan. Queríamos poner el énfasis en eso", dice en una conversación muy profunda con nuestro matutino, donde tratamos de reconocer cómo se llegó a "Negras Nuestras".
Las bailarinas-creadoras son Alexis Mendez, Maria Laura Lerma y Mariela Cazón, que cuentan con el acompañamiento escénico y creativo de Verónica Navarro, con la composición musical de Hugo Cazón y Nora Benaglia y Xuxuy Banto.
El proceso
"La presentación del libro no fue convencional. Fueron obras danzadas pero con textos del libro", manifiesta Cazón, "en ese momento el desarrollo de la obra se ceñía más a la letra del libro y al orden del libro".
Ahora "esta obra de danza está atravesada por las energías de las entidades que aparecen, que comenzamos a conocer en sus puntos de contacto con las cosmopercepciones de esta región, como la Pachamama, Santa Bárbara, La Virgen de la Candelaria, el Huayra, etc.", narra.
En la primera obra "era más fácil explicar de qué se trata porque se menciona al pueblo de Iturbe, un paraje al que hace alusión, la presencia de una mujer afrodescendiente que vivió allí, que era una estratega del pueblo contra los españoles, y muy activa con el ejército de Belgrano, acompañando el Éxodo Jujeño", se explaya la artista. "Esta nueva obra es mucho más danzada, sin texto, es más para sentirla que entenderla. No sigue tanto la letra del libro. En esta puesta, el éxodo es salir de la colonización y llegar a otro punto, dentro de la propia esfera, de la propia identidad, de cuerpo descolonizado. Es poder llegar a otro lugar identitario, que sí abarque lo indio, lo negro, y que entienda toda esta América", dice muy emocionada de lo ocurrido.
"En el libro era el Éxodo Jujeño de verdad, y en esta es despojarse de algunas cosas y dejarlas atrás", expresa, "es un éxodo propio, que consiste en dejar conceptos y cuestiones atrás".
A pregunta es ¿Cómo se labura esto, y cuándo surge la necesidad del elenco de hacer esta nueva puesta? ¿Cómo hacen para despegarse del texto para el que fueron convocadas en primera instancia?
Mariela Cazón piensa y dice "somos una agrupación particular que empezó a bailar ritmos afros. Era un aprendizaje y un contacto con esas danzas, una internalización y un abrazo. No es que ahora bailamos afro o brasileño, pero sí bailamos los puntos de contacto de esos, nuestros seres tutelares, de esas enormes concepciones con nuestras entidades. En esos puntos de contacto es donde nosotros ponemos el énfasis y lo bailamos, y lo mezclamos. Estamos bailando afro y de golpe suena cueca", cuenta.
Sobre su experiencia personal, la reconocida bailarina de folclore en nuestra provincia, cuenta: "La gestora de la idea es Verónica Navarro. Ella siembra ritmos afro en el aire, en la tierra y en mi corazón también porque yo siempre era de lo andino, tengo 53 años y nunca me interesó el afro, y ahora sí, porque lo sentí y lo amé. No es una conceptualización, sino que de golpe lo corporalicé. Y la verdad está tan cerca, que no sé si ella sembró, o ya estaban, pero si era así, estaban en un subsuelo, porque si lo indio es tabú todavía, imagínate lo negro, y en estas regiones", reflexiona. "'Negras nuestras' tiene que ver con 'Negras muertas' en la sonoridad, hay una resignificación", comenta.
El elenco
Mariela Cazón es bailarina folklórica, de gran trayectoria en nuestra provincia.
Alexis Méndez es un bailarín, veinteañero, de gran profundidad en su propuesta artística, comprometido con el arte disidente y su lucha. Bailó folklore y caporal en Humahuaca, luego se formó con Emilce Scilingo en la capital (danza contemporánea), y hoy tiene una visión muy particular de la enseñanza de la danza. "Absorbió mucho la danza afro", asegura Cazón.
Y María Laura Lerma, también autora de la parte literaria, "es psicóloga, trabaja en el frente de mujeres y disidencias, y tiene una apertura tremenda en la danza y por la historia", define.
Finalmente habla se la coordinadora de toda esta puesta y gestora, Verónica Navarro, nacida en La Pampa, formada en Córdoba, y actualmente radicada en Salvador de Bahía, en Brasil, donde se está por doctorar en Estudios de Arte y Afroamericanos. Viene a la quebrada por períodos largos desde hace un tiempo porque está realizando una tesis de estas realidades a las que apuntamos, sobre qué hay de afro en nuestras culturas. Nos estudia además que nos quiere y nos comparte", concluye Cazón.