¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

16°
10 de Mayo,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Laberintos Humanos: Diferencias

Miércoles, 30 de diciembre de 2020 01:02

Más allá de que yo opinara que la misma realidad era distinta para cada observador, Pierre Donadou Quispe prefirió enfocarse en Perla, a quien cada uno de nosotros describía de una manera distinta. Y no eran esas diferencias que hacen a la subjetividad de la mirada, sino a colores de ojos y de cabellos distintos, altura y anchura, modos y gestos diferentes.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Más allá de que yo opinara que la misma realidad era distinta para cada observador, Pierre Donadou Quispe prefirió enfocarse en Perla, a quien cada uno de nosotros describía de una manera distinta. Y no eran esas diferencias que hacen a la subjetividad de la mirada, sino a colores de ojos y de cabellos distintos, altura y anchura, modos y gestos diferentes.

Cada cual veía en ella al modelo de mujer que le gustaba, y entonces sonreí, caminado con Donadou por la plaza, pensando que hay personas que son como camaleones: cada quien la ve de un modo distinto. Hay personalidades que, por su inseguridad, se esfuerzan en ser tal como la persona con la que conversan, pero no parecía ser este el caso.

En el caso de Perla, era evidentemente una mujer distinta para cada uno de nosotros, y le pregunté a Pierre si eso no nos pasaba a todos con todos. ¿Cómo me ve usted a mí?, le pregunté y me describió diferente a como yo mismo me veía, pero eso no era algo tan difícil. No es que fuera distinto en el sentido en el que mi Perla era diferente a la suya.

Uno se ve más joven o menos gordo, si es que no sucede a la inversa y se subvalora, por lo que dedujimos que las distintas imágenes de Perla, en la misma persona, debían más bien tratarse de algo del orden de la magia o de la brujería. Tal vez fuera una enfermedad, me dijo pero pronto desestimó esa idea.

La solución era sacarle una fotografía, y entonces enfrentarnos a una visión objetiva de sus ojos, de sus rasgos y cabellos, de sus modos de expresarse y de sentarse.

Temas de la nota