En el 43º aniversario de la Noche del Apagón, integrantes de Madres, Hijos y Familiares de Detenidos y Desaparecidos durante el proceso cívico-militar en la década del 70 marcharán desde la localidad de Calilegua hasta Libertador General San Martín.
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En el 43º aniversario de la Noche del Apagón, integrantes de Madres, Hijos y Familiares de Detenidos y Desaparecidos durante el proceso cívico-militar en la década del 70 marcharán desde la localidad de Calilegua hasta Libertador General San Martín.
Con un sencillo acto se realizará esta recordación de aquella terrible noche de 1976 en la que fueron detenidas unas 400 personas y de las cuales permanecen desaparecidas 30. El mismo tendrá lugar en el monolito ubicado en la avenida Sarmiento de la localidad de Calilegua, desde donde se procederá a iniciar la marcha hasta Libertador, pasando en primer lugar frente al monolito donde se encuentran grabados los nombres de los detenidos-desaparecidos.
Luego de esta parada los manifestantes se dirigirán hacia la plaza central de Libertador, donde tras otro acto se procederá a la desconcentración.
Guillermina Díaz, familiar de una de las víctimas de ese episodio, recordó que la Noche del Apagón fue un 20 de julio, y es por eso que respetan ese día.
También dijo que "todos los años nos juntamos un grupo de familiares en el monolito que nos recuerda a nuestros detenidos-desaparecidos para hacer un acto simbólico, y desde allí partimos hacia Libertador. Todo comienza alrededor de las 14.30, para luego a las 15 iniciar la marcha que concluirá en la plaza de Libertador", indicó.
Díaz pidió a la comunidad que participe, que no sea indiferente a este recordatorio. "Ayer nos tocó a nosotros y hoy le puede tocar a los demás. No quisiéramos que nadie pase por lo que nosotros tuvimos que pasar", dijo para finalizar.
Cabe señalar que entre el 20 y el 27 de julio de 1976, la dictadura cívico-militar organizó cortes de luces en las citadas localidades del Ramal jujeño para secuestrar a 400 trabajadores, estudiantes, militantes y profesionales. Inicialmente se creyó que se trataba de un corte de energía, pero las frenadas de vehículos y los gritos en varias de las viviendas advirtieron que ocurría un operativo militar. Muchos de los secuestrados en el megaoperativo fueron trasladados a comisarías y cárceles de San Salvador de Jujuy y al centro clandestino de detención de Guerrero.