El joven dirigente dijo que percibe un fuerte enojo en los vecinos: "se cansaron de las mentiras. A la gente no hay que subestimarla y siempre ir con la verdad". También habló de las necesidades de la ciudad que pasan por la obra pública, más seguridad y sobre todo "piden más atención".
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El joven dirigente dijo que percibe un fuerte enojo en los vecinos: "se cansaron de las mentiras. A la gente no hay que subestimarla y siempre ir con la verdad". También habló de las necesidades de la ciudad que pasan por la obra pública, más seguridad y sobre todo "piden más atención".
-Lo vemos debutando en la política y buscando una banca en el Concejo Deliberante de Palpalá. Un buen inicio sobre todo si se siente la política y en su caso desde la sangre.
-Muchos me preguntaron el porqué de mi inicio en política. Como yo le digo a mucha gente, uno tiene un padre panadero y quiere ser panadero. Más allá de eso, Palpalá es el lugar donde yo nací, y la verdad que tengo un gran enojo como lo tienen muchos vecinos por el abandono y el desinterés porque las cosas mejoren. De ahí que me nacieron estas ganas de trabajar por mi ciudad con mucho anhelo, con proyectos para mejorar la calidad de vida y revertir lo que hoy padecen y qué mejor que arrancar desde el Concejo y no en otro cargo.
-¿Cuando hablamos de esa bronca, ese enojo, qué es lo que dicen los vecinos en ese contacto que usted tiene al recorrer los distintos barrios?
-Lo primero que dice la gente es que están cansados de los políticos, que no confían y que el que sube no hace nada. Ya están cansados y es entendible si uno recorre los distintos sectores. Yo la verdad como les digo a todos, más allá de mi postura que hoy arranca en la política, es trabajar por ellos, no pretendo otra cosa más que trabajar. Porque otras necesidades no tengo, simplemente quiero que la gente me dé esa oportunidad de jugarme en el Concejo por ellos.
-¿Esa sensación negativa que tiene el vecino con la clase política actual se puede revertir?
-Sí, claro que sí. Simplemente a la gente no hay que mentirle, hay que decirle las cosas de frente y como son. Sin dar vueltas. No hay que subestimar al vecino. La mentira tiene patas cortas. Hay que decirles las cosas como son, y tratar de ayudarlos con lo que uno puede y si realmente no se puede hay que decirles "mirá, yo no te puedo ayudar en esto. O podemos buscar esta solución al problema", pero hacerlo. Las necesidades son muchas. Uno solo no puede, pero dialogando se pueden superar. Entiendo que esa es la manera de revertir la situación al frente de la ciudadanía que piensa que los políticos son todos iguales.
-Cuándo realiza las recorridas por los distintos barrios, ¿Con qué se encuentra?
-Mucho abandono. No solamente en los barrios, en las calles, en los espacios verdes, falta de iluminación, sino también con el tema de la inseguridad, la violencia y mucha drogadicción. Es muy notorio que la gente de la periferia te pida seguridad porque hay muchos problemas de drogadicción en los alrededores. En cambio, en otros lugares donde tienen un estatus social un poco más alto, lo primero que piden es trabajo. En todas estas cosas creo que hay que trabajar fuertemente.
-Muchas soluciones pasan por la acción del Ejecutivo. ¿Desde el Deliberante se pueden sumar herramientas?
-Sí, se pueden generar esas herramientas. Creo que desde el Concejo hay que hacerle ver al intendente lo que la gente realmente necesita, marcarle las cosas que hacen falta. Yo cuando entre al Deliberante, si tengo el acompañamiento del vecino, espero ser escuchado. Yo siempre les digo, soy muy testarudo y voy a trabajar y voy a gritar, si tengo que golpear puertas lo voy a hacer. Es mi forma de ser. A mí me enseñaron desde chico que hay que pechar todos los días el carro, no sólo por épocas, sino todo el día.
-¿Qué propuestas lleva Rivarola al Concejo Deliberante?
-La propuesta siempre es la de trabajar para mejorar la calidad de vida de los vecinos. En materia de obra pública, salud, seguridad, drogadicción, deporte y en todo lo que tenga que ver con el desarrollo. Estoy preocupado además por el tema de los elevados impuestos. Creo que vivimos en una situación coyuntural en el país que es complicada sobre todo para el pequeño o mediano comercio. Creo que hay que reestructurar el tema impositivo. Se puede planificar y sentarse en una buena mesa de trabajo. Acá no sirve decir amiguitos o no amiguitos, acá yo veo que hay que trabajar sin importar el color político mientras sea para la ciudad.
-¿Qué le diría a la gente de Palpalá para que acompañe con su voto a los candidatos del Frente Justicialista el domingo?
-En mi ciudad hay muchas colectoras, muchos candidatos, pero al final quedan sólo los mejores. Los que hacen bien las cosas. Lo que le puedo decir a la gente, como lo hago en cada reunión y a cada vecino que cruzo, que piense bien y que vote a conciencia. Que sigan a su gente y a los candidatos. Que vean bien el historial de cada uno de ellos. Qué es lo que hizo y pretende hacer. La prioridad en todo esto es lograr que la ciudad crezca y sobre todo que los candidatos no mientan y digan siempre la verdad como lo hacemos nosotros en cada "cara a cara" con los palpaleños. Después si esa persona sube, que la siga y vea qué es lo que hace, si realmente trabaja o no por la ciudad. Los vecinos saben todo, no hay que subestimarlos.