Al menos 71 muertos y más de 98 heridos provocó ayer en Adén un atentado que se adjudicó el Estado Islámico (EI), cuando un chofer suicida logró irrumpir con un coche bomba a un centro de reclutamiento de milicias progubernamentales en el barrio de Al Mansura, y lo hizo estallar.
Es la masacre más sangrienta en la actual "capital provisoria" de Yemen desde que el gobierno la recuperó en 2015.
El ministerio de salud de Yemen, hasta ahora, dio como último dato oficial la cifra de 71 muertos. Pero la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, la llevó a 60 fallecidos, dato que confirmaron fuentes médicas a la cadena BBC.
Sin embargo, horas más tarde el diario libanés L''Orient le Jour señaló que la cifra de víctimas no había dejado de crecer y pasado el mediodía llegaba a 71, con 98 heridos.
Los reclutas estaban completando las formalidades para ingresar a las fuerzas que están combatiendo a los rebeldes hutíes y sus aliados, en el norte del país.
Según testigos presenciales citados por el rotativo, el atacante había aprovechado el ingreso de una camioneta de entregas para lanzar su vehículo contra la cola de postulantes. El estallido fue tan potente, según un responsable de seguridad, que "hizo caer el techo de un aula sobre numerosos reclutas".
Restos del coche bomba yacían dispersos por todo el playón, y había manchones de sangre en todos los muros del centro.
En un comunicado publicado en Internet, el grupo Wilayat Adén (Provincia de Adén del califato del EI) aseguró que "el jinete Abu Sufian al Adani logró explosionar su coche bomba en un centro de reclutamiento de las milicias apóstatas de (el presidente yemení) Abdo Rabu Mansur Hadi".
Wilayat Adén señaló que el ataque causó "el exterminio de cerca de 60 apóstatas y decenas de heridos". El centro de reclutamiento lo utiliza la milicia progubernamental Resistencia Popular.
El comunicado fue publicado poco después de que la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, informara de "una operación de martirio (suicida) efectuada por un combatiente del Estado Islámico contra un centro de reclutamiento en Adén".
Los soldados iban a recibir entrenamiento en cuarteles de las Fuerzas Armadas yemeníes en la región saudita de Nashrán, fronteriza con Yemen.
Los reclutas iban a sumarse a un grupo de 5 mil soldados.
Es la masacre más sangrienta en la actual "capital provisoria" de Yemen desde que el gobierno la recuperó en 2015.
El ministerio de salud de Yemen, hasta ahora, dio como último dato oficial la cifra de 71 muertos. Pero la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, la llevó a 60 fallecidos, dato que confirmaron fuentes médicas a la cadena BBC.
Sin embargo, horas más tarde el diario libanés L''Orient le Jour señaló que la cifra de víctimas no había dejado de crecer y pasado el mediodía llegaba a 71, con 98 heridos.
Los reclutas estaban completando las formalidades para ingresar a las fuerzas que están combatiendo a los rebeldes hutíes y sus aliados, en el norte del país.
Según testigos presenciales citados por el rotativo, el atacante había aprovechado el ingreso de una camioneta de entregas para lanzar su vehículo contra la cola de postulantes. El estallido fue tan potente, según un responsable de seguridad, que "hizo caer el techo de un aula sobre numerosos reclutas".
Restos del coche bomba yacían dispersos por todo el playón, y había manchones de sangre en todos los muros del centro.
En un comunicado publicado en Internet, el grupo Wilayat Adén (Provincia de Adén del califato del EI) aseguró que "el jinete Abu Sufian al Adani logró explosionar su coche bomba en un centro de reclutamiento de las milicias apóstatas de (el presidente yemení) Abdo Rabu Mansur Hadi".
Wilayat Adén señaló que el ataque causó "el exterminio de cerca de 60 apóstatas y decenas de heridos". El centro de reclutamiento lo utiliza la milicia progubernamental Resistencia Popular.
El comunicado fue publicado poco después de que la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, informara de "una operación de martirio (suicida) efectuada por un combatiente del Estado Islámico contra un centro de reclutamiento en Adén".
Los soldados iban a recibir entrenamiento en cuarteles de las Fuerzas Armadas yemeníes en la región saudita de Nashrán, fronteriza con Yemen.
Los reclutas iban a sumarse a un grupo de 5 mil soldados.
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Al menos 71 muertos y más de 98 heridos provocó ayer en Adén un atentado que se adjudicó el Estado Islámico (EI), cuando un chofer suicida logró irrumpir con un coche bomba a un centro de reclutamiento de milicias progubernamentales en el barrio de Al Mansura, y lo hizo estallar.
Es la masacre más sangrienta en la actual "capital provisoria" de Yemen desde que el gobierno la recuperó en 2015.
El ministerio de salud de Yemen, hasta ahora, dio como último dato oficial la cifra de 71 muertos. Pero la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, la llevó a 60 fallecidos, dato que confirmaron fuentes médicas a la cadena BBC.
Sin embargo, horas más tarde el diario libanés L''Orient le Jour señaló que la cifra de víctimas no había dejado de crecer y pasado el mediodía llegaba a 71, con 98 heridos.
Los reclutas estaban completando las formalidades para ingresar a las fuerzas que están combatiendo a los rebeldes hutíes y sus aliados, en el norte del país.
Según testigos presenciales citados por el rotativo, el atacante había aprovechado el ingreso de una camioneta de entregas para lanzar su vehículo contra la cola de postulantes. El estallido fue tan potente, según un responsable de seguridad, que "hizo caer el techo de un aula sobre numerosos reclutas".
Restos del coche bomba yacían dispersos por todo el playón, y había manchones de sangre en todos los muros del centro.
En un comunicado publicado en Internet, el grupo Wilayat Adén (Provincia de Adén del califato del EI) aseguró que "el jinete Abu Sufian al Adani logró explosionar su coche bomba en un centro de reclutamiento de las milicias apóstatas de (el presidente yemení) Abdo Rabu Mansur Hadi".
Wilayat Adén señaló que el ataque causó "el exterminio de cerca de 60 apóstatas y decenas de heridos". El centro de reclutamiento lo utiliza la milicia progubernamental Resistencia Popular.
El comunicado fue publicado poco después de que la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, informara de "una operación de martirio (suicida) efectuada por un combatiente del Estado Islámico contra un centro de reclutamiento en Adén".
Los soldados iban a recibir entrenamiento en cuarteles de las Fuerzas Armadas yemeníes en la región saudita de Nashrán, fronteriza con Yemen.
Los reclutas iban a sumarse a un grupo de 5 mil soldados.
Es la masacre más sangrienta en la actual "capital provisoria" de Yemen desde que el gobierno la recuperó en 2015.
El ministerio de salud de Yemen, hasta ahora, dio como último dato oficial la cifra de 71 muertos. Pero la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, la llevó a 60 fallecidos, dato que confirmaron fuentes médicas a la cadena BBC.
Sin embargo, horas más tarde el diario libanés L''Orient le Jour señaló que la cifra de víctimas no había dejado de crecer y pasado el mediodía llegaba a 71, con 98 heridos.
Los reclutas estaban completando las formalidades para ingresar a las fuerzas que están combatiendo a los rebeldes hutíes y sus aliados, en el norte del país.
Según testigos presenciales citados por el rotativo, el atacante había aprovechado el ingreso de una camioneta de entregas para lanzar su vehículo contra la cola de postulantes. El estallido fue tan potente, según un responsable de seguridad, que "hizo caer el techo de un aula sobre numerosos reclutas".
Restos del coche bomba yacían dispersos por todo el playón, y había manchones de sangre en todos los muros del centro.
En un comunicado publicado en Internet, el grupo Wilayat Adén (Provincia de Adén del califato del EI) aseguró que "el jinete Abu Sufian al Adani logró explosionar su coche bomba en un centro de reclutamiento de las milicias apóstatas de (el presidente yemení) Abdo Rabu Mansur Hadi".
Wilayat Adén señaló que el ataque causó "el exterminio de cerca de 60 apóstatas y decenas de heridos". El centro de reclutamiento lo utiliza la milicia progubernamental Resistencia Popular.
El comunicado fue publicado poco después de que la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, informara de "una operación de martirio (suicida) efectuada por un combatiente del Estado Islámico contra un centro de reclutamiento en Adén".
Los soldados iban a recibir entrenamiento en cuarteles de las Fuerzas Armadas yemeníes en la región saudita de Nashrán, fronteriza con Yemen.
Los reclutas iban a sumarse a un grupo de 5 mil soldados.