Su culto se funda en el amor de Cristo a los hombres y es el mismo Jesús el que toma la iniciativa, apareciéndose a Santa Margarita María de la ciudad de Alacoque (Francia); quien en Paray le Monial en junio de 1673, tuvo una misión en la que Cristo mostrándole su corazón (simbolizado con tres insignias: Cruz, el precio de nuestra Redención; corona de espinas son las almas que no corresponden a su amor infinito; y la herida de la lanza es el desprecio de todos los hombres). Le dice a Santa Margarita "Te pido una fiesta particular en Honor a mi Corazón, el viernes siguiente a Corpus Cristi "en reparo al inmenso misterio de su amor olvidado, herido y despreciado.
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Su culto se funda en el amor de Cristo a los hombres y es el mismo Jesús el que toma la iniciativa, apareciéndose a Santa Margarita María de la ciudad de Alacoque (Francia); quien en Paray le Monial en junio de 1673, tuvo una misión en la que Cristo mostrándole su corazón (simbolizado con tres insignias: Cruz, el precio de nuestra Redención; corona de espinas son las almas que no corresponden a su amor infinito; y la herida de la lanza es el desprecio de todos los hombres). Le dice a Santa Margarita "Te pido una fiesta particular en Honor a mi Corazón, el viernes siguiente a Corpus Cristi "en reparo al inmenso misterio de su amor olvidado, herido y despreciado.
"He aquí este Corazón que tanto ha amado a los hombres".
Se trata así de una fiesta de reparación al amor que no es amado, este se desarrollo y extendió a través del tiempo y la siguiente sucesión de Papas la acogieron, alentaron y propagaron, instituyéndola como una de las fiestas principales de la Iglesia Católica.
Primeros años de la iglesia
El Padre Germán Rehmelin iniciador de la construcción de la parroquia, el padre Zoica, quién siguió sus pasos, el Padre Raimundo Keiner, sucedido por el sacerdote Julián Mozo, el padre Guillermino Macretti italiano, el padre Gonzalo Artero García, quien llegó de España trayendo consigo desde Valencia las imágenes de la Virgen Inmaculada y de San José, que están entronizadas en el altar mayor de la iglesia. Luego fue trasladado, haciéndose cargo de la Parroquia, hasta el año 1963, el Padre Humberto Gómez, tuvieron gran participación en los primeros años de la Iglesia.
En otoño de 1963, llegó a Libertador General San Martín, trasladado desde El Piquete, el Padre Aurelio Martínez, quien fue el iniciador de la construcción del monumento al Sagrado Corazón de Jesús. Llevar a cabo aquella obra fue la cuota de toda la feligresía, y del apoyo del intendente José Acosta.
La imagen fue donada por la señora Inés Restón de Asmuzi.
Todos los años, devotos del Sagrado Corazón de Jesús transitan las calles, en ferviente procesión hasta el lugar donde se levantó dicho monumento.
La feligresía toda se regocija cada mes de junio, Día del Sagrado Corazón de Jesús, patrono de la ciudad de Libertador General San Martín.