Dos delincuentes armados ingresaron a la vivienda que el delantero del club Atlético Patronato de Paraná Diego Jara habita en la zona sur de la capital entrerriana y, tras reducir a su esposa y a sus suegros, y amenazar con secuestrar a la hija del jugador, de un año y un mes, robaron una importante suma de dinero que sabían que el deportista había cobrado recientemente.
Voceros policiales confirmaron que el asalto se produjo en momentos en que el jugador se encontraba entrenando con el primer equipo de Patronato, que el domingo venidero enfrentará a Ferro por la 32ª fecha del Torneo Nacional de Fútbol.
Jara contó ayer a la prensa los pormenores del episodio y dijo que sospecha que el asalto fue cometido por barras bravas del club, mientras que fuentes vinculadas con la investigación creen que los ladrones disponían de información sobre la existencia de dinero en el domicilio de Jara, quien hace unos días cobró su sueldo como jugador profesional.
Tras ingresar a la casa del futbolista, los ladrones encerraron en el baño a su mujer, a su hija y a su suegra, mientras que a su suegro, que llegó momentos más tarde a la vivienda, lo maniataron.
"Esta fue una batida, y ahora queremos ordenar la casa e irnos de acá, porque es inseguro", expresó Jara al dar a conocer detalles del asalto y revelar que los ladrones amenazaron con secuestrar a su pequeña hija ante la negativa de su esposa de entregarles el dinero.
El jugador admitió que se enteró de la situación en plena práctica, lo que lo obligó a retirarse rápidamente para dirigirse a su domicilio, ubicado en la zona sur de la capital entrerriana.
"Los ladrones tenían de rehén a mi señora, a la nena y a mi suegra, encerradas en al baño. Cuando llegó mi suegro, también lo apuntaron y lo hicieron tirar al piso, donde lo ataron", relató el jugador.
Jara confirmó que "hace unos días había cobrado en el club" y que los asaltantes "sólo pedían plata y le gritaban a mi señora que si no le daba el dinero se iban a llevar a la nena". Dijo además que su mujer repetía que no había plata, "hasta que uno la encontró y se fueron. Pedían por la caja fuerte, pero yo no tengo", agregó.
El jugador reconoció tener "una gran angustia". "Estoy muy desilusionado, porque si le hubiera pasado algo a mi hija capaz que a esta hora ando haciendo locuras", dijo.
Los atracadores le "revolvieron la casa entera" y atribuyó el robo a "una batida", en la que no descartó a algún integrante de la barra brava del Club Patronato.
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Dos delincuentes armados ingresaron a la vivienda que el delantero del club Atlético Patronato de Paraná Diego Jara habita en la zona sur de la capital entrerriana y, tras reducir a su esposa y a sus suegros, y amenazar con secuestrar a la hija del jugador, de un año y un mes, robaron una importante suma de dinero que sabían que el deportista había cobrado recientemente.
Voceros policiales confirmaron que el asalto se produjo en momentos en que el jugador se encontraba entrenando con el primer equipo de Patronato, que el domingo venidero enfrentará a Ferro por la 32ª fecha del Torneo Nacional de Fútbol.
Jara contó ayer a la prensa los pormenores del episodio y dijo que sospecha que el asalto fue cometido por barras bravas del club, mientras que fuentes vinculadas con la investigación creen que los ladrones disponían de información sobre la existencia de dinero en el domicilio de Jara, quien hace unos días cobró su sueldo como jugador profesional.
Tras ingresar a la casa del futbolista, los ladrones encerraron en el baño a su mujer, a su hija y a su suegra, mientras que a su suegro, que llegó momentos más tarde a la vivienda, lo maniataron.
"Esta fue una batida, y ahora queremos ordenar la casa e irnos de acá, porque es inseguro", expresó Jara al dar a conocer detalles del asalto y revelar que los ladrones amenazaron con secuestrar a su pequeña hija ante la negativa de su esposa de entregarles el dinero.
El jugador admitió que se enteró de la situación en plena práctica, lo que lo obligó a retirarse rápidamente para dirigirse a su domicilio, ubicado en la zona sur de la capital entrerriana.
"Los ladrones tenían de rehén a mi señora, a la nena y a mi suegra, encerradas en al baño. Cuando llegó mi suegro, también lo apuntaron y lo hicieron tirar al piso, donde lo ataron", relató el jugador.
Jara confirmó que "hace unos días había cobrado en el club" y que los asaltantes "sólo pedían plata y le gritaban a mi señora que si no le daba el dinero se iban a llevar a la nena". Dijo además que su mujer repetía que no había plata, "hasta que uno la encontró y se fueron. Pedían por la caja fuerte, pero yo no tengo", agregó.
El jugador reconoció tener "una gran angustia". "Estoy muy desilusionado, porque si le hubiera pasado algo a mi hija capaz que a esta hora ando haciendo locuras", dijo.
Los atracadores le "revolvieron la casa entera" y atribuyó el robo a "una batida", en la que no descartó a algún integrante de la barra brava del Club Patronato.