El presidente,
Enrique Peña, sumó ayer un nuevo escándalo a los varios que minan su gestión, a partir de que un diario estadounidense publicó que compró una casa a un contratista apenas asumió su cargo de gobernador del Estado de
México, operación que desde el Ejecutivo consideraron absolutamente legal.
El vocero de la Presidencia, Eduardo Sánchez, fue quien destacó que fue "legal" la adquisición de esa lujosa vivienda, ubicada junto a un club de golf en el centro del balneario de Ixtapan de la Sale incluida en las declaraciones patrimoniales del mandatario.
Sánchez aseguró que a Peña Nieto "no le corresponde participar en los procesos de asignación de contratos" después de la divulgación de la noticia en
The Wall Street Journal, que publicó que a fines de 2005, a unas semanas de asumir como gobernador, el ahora presidente compró una propiedad en el club de golf de Ixtapan por 372.000 dólares.
La compra fue a una compañía del empresario Roberto San Román, que después logró contratos por 100 millones de dólares del Gobierno del Estado de México, aunque el vocero del Ejecutivo expresó que "no hubo favoritismos".
Según el diario, "la empresa nunca había ganado un contrato directamente del Gobierno federal antes de que Peña Nieto asumiera el poder", y después logró al menos 11 contratos federales, seis de ellos sin que mediara una licitación.
En noviembre pasado, un portal de noticias publicó que la esposa de Peña, la actriz Angélica Rivera, adquirió en 4 millones de dólares una casa que vale al menos 7 millones, a la contratista gubernamental Higa, la que próximamente venderá.
El presidente,
Enrique Peña, sumó ayer un nuevo escándalo a los varios que minan su gestión, a partir de que un diario estadounidense publicó que compró una casa a un contratista apenas asumió su cargo de gobernador del Estado de
México, operación que desde el Ejecutivo consideraron absolutamente legal.
El vocero de la Presidencia, Eduardo Sánchez, fue quien destacó que fue "legal" la adquisición de esa lujosa vivienda, ubicada junto a un club de golf en el centro del balneario de Ixtapan de la Sale incluida en las declaraciones patrimoniales del mandatario.
Sánchez aseguró que a Peña Nieto "no le corresponde participar en los procesos de asignación de contratos" después de la divulgación de la noticia en
The Wall Street Journal, que publicó que a fines de 2005, a unas semanas de asumir como gobernador, el ahora presidente compró una propiedad en el club de golf de Ixtapan por 372.000 dólares.
La compra fue a una compañía del empresario Roberto San Román, que después logró contratos por 100 millones de dólares del Gobierno del Estado de México, aunque el vocero del Ejecutivo expresó que "no hubo favoritismos".
Según el diario, "la empresa nunca había ganado un contrato directamente del Gobierno federal antes de que Peña Nieto asumiera el poder", y después logró al menos 11 contratos federales, seis de ellos sin que mediara una licitación.
En noviembre pasado, un portal de noticias publicó que la esposa de Peña, la actriz Angélica Rivera, adquirió en 4 millones de dólares una casa que vale al menos 7 millones, a la contratista gubernamental Higa, la que próximamente venderá.