Se acerca la fecha del segundo juicio oral y público que marcará un punto crucial en la carrera deportiva de Sebastián Villa, exjugador de Boca Juniors que actualmente juega en Bulgaria. La última novedad en el caso es que la Justicia exigió que el colombiano regrese a Argentina antes del lunes 1 de abril, fecha de inicio de las audiencias (las restantes se llevarán a cabo el miércoles 3 y jueves 4).
inicia sesión o regístrate.
Se acerca la fecha del segundo juicio oral y público que marcará un punto crucial en la carrera deportiva de Sebastián Villa, exjugador de Boca Juniors que actualmente juega en Bulgaria. La última novedad en el caso es que la Justicia exigió que el colombiano regrese a Argentina antes del lunes 1 de abril, fecha de inicio de las audiencias (las restantes se llevarán a cabo el miércoles 3 y jueves 4).
Villa, condenado a dos años y un mes de prisión en suspenso por violencia de género contra Daniela Cortés, una de sus exparejas, prometió regresar puntualmente. Su abogado, Martín Apolo, también lo asegura. Sin embargo, en caso de incumplimiento, Interpol podría solicitar su captura internacional, ya que no hay tratado de extradición con el país europeo.
El jugador enfrentará este año un nuevo proceso por "abuso sexual con acceso carnal" contra Tamara Doldán, quien lo denunció en mayo de 2022. La pena prevista va de seis a 15 años, y una nueva condena lo llevaría directamente a prisión debido a su historial.
¿Por qué sigue en libertad? El juicio por el caso de Cortés aún no fue confirmado en instancia definitiva, por lo que la condena no es firme. Además, Villa cumplió con todas las citaciones, participó en las audiencias y presentó en el Tribunal su contrato de trabajo, domicilio y pasaje de regreso.
La nueva acusación contra Villa está respaldada por varias pruebas en su contra. En primer lugar, el día de la presunta agresión sexual, Doldán informó a tres amigas, quienes luego se dirigieron al barrio privado donde ocurrieron los hechos (con registros de ingreso). Además, el entorno del jugador se puso en contacto con la denunciante para ofrecerle cinco mil dólares (cantidad que aceptó y luego devolvió), con mensajes de WhatsApp como prueba. Por último, la denunciante buscó atención médica en una guardia ginecológica por un "dolor abdominal".