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19 de Mayo,  Jujuy, Argentina
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Temprano, pero todos miran el 2025

Lunes, 06 de mayo de 2024 01:00
2025 / EL NUEVO OBJETIVO DE UNA POLÍTICA ANTIGUA.

Es tan vertiginosa la vida política argentina que aunque parezca prematuro, todo lo que hace, dice (y lo que no dice) la dirigencia, se encuadra rumbo a las elecciones de medio término del 2025. Javier Milei lanzó la campaña cuando dijo enojado con la casta que no es tan importante que hoy le retaceen su apoyo, que simplemente hay que esperar al 2025, cuando según sus predicciones, LLA volverá a arrasar en las urnas y lo fortificará en los parlamentos. La oposición, en sus diferentes matices, despreció la profecía, pero mirando las encuestas reconocen en la intimidad que siguen perplejos y confundidos, sin liderazgos fuertes y sin respuestas para la gente. Por eso sin brújula, sin proyectos claros y sobre todo, sin un discurso que cautive al electorado, se lanzan atolondradamente a la carrera del 2025. En Jujuy, como el resto de las provincias, y en todo el país se muestra claramente esta situación.

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Es tan vertiginosa la vida política argentina que aunque parezca prematuro, todo lo que hace, dice (y lo que no dice) la dirigencia, se encuadra rumbo a las elecciones de medio término del 2025. Javier Milei lanzó la campaña cuando dijo enojado con la casta que no es tan importante que hoy le retaceen su apoyo, que simplemente hay que esperar al 2025, cuando según sus predicciones, LLA volverá a arrasar en las urnas y lo fortificará en los parlamentos. La oposición, en sus diferentes matices, despreció la profecía, pero mirando las encuestas reconocen en la intimidad que siguen perplejos y confundidos, sin liderazgos fuertes y sin respuestas para la gente. Por eso sin brújula, sin proyectos claros y sobre todo, sin un discurso que cautive al electorado, se lanzan atolondradamente a la carrera del 2025. En Jujuy, como el resto de las provincias, y en todo el país se muestra claramente esta situación.

La primera obligación es de los radicales, que deben fortalecer la gestión en la sobria conducción de Carlos Sadir, que mañana cumple un año de su triunfo en el 2023, porque para el 2025, Gerardo Morales ya no actuará como la locomotora que todo lo arrasaba. Gran tema a resolver. "El GM no se desentiende, pero por ahora no está de humor ni de ánimo para lanzarse a una campaña" responden con prudencia si se les consulta de si intentaría volver al Congreso en una de las bancas que dejarán Natalia Sarapura (UCR), Leila Susana Chaher (UxP) y Alejandro Vilca (FIT). "Gerardín dejará pasar un tiempo y podrá volver cuando quiera" completan con esperanza. Pero al mismo tiempo, infidentes ucerreístas reconocen que "el partido está inmovilizado y desconcertado". Es verdad: los radicales perdieron el aguerrido cromosoma de su ADN que definía "Donde hay dos radicales, hay una interna". Ejemplo: ante la consulta sobre la extraña conducción nacional de Martín Lousteau, responden "somos orgánicos, ya lo discutiremos adentro", pero en reserva mascullan sapos y culebras en contra del exministro de Cristina Kirchner y sus actitudes de líbero. Se consuelan interpretando que sus antiguos socios del PRO de Mauricio y la Coalición Cívica de Lilita, "están peor, y si siguen así, van a desaparecer", murmuran compartiendo un café. En Jujuy, sólo cuidan a Lyder, reserva de buenos dirigentes.

No es diferente el panorama del Justicialismo. Repentinamente soplan vientos de reorganización, pero tan caóticos, que si alguien no encauza rápidamente las buenas intenciones, todo será peor. Algunos sueñan con la unidad, otros con rupturas definitivas. Hay discursos que afirman que el PJ está "movilizado", quizá porque no conocieron lo que era un PJ realmente movilizado. O insisten con el eslogan "El Partido está de pie", lo que seguramente es así, pero agarrotado. Y como siempre a la sombra generosa del PJ existen y buscan crecer, algunos muletos como "Arriba Jujuy" de la familia Moisés y allegados, "Gana Jujuy" del exgobernador Agustín Perassi, "Jujuy Avanza" que afilia todos los días agrupaciones de variada historia y vigencia, y frentes que convocan con mensajes altisonantes y resultados modestos. Mientras "Unidad por Jujuy" de Juan Cardozo Traillou y "Jujuy tiene futuro" de Rodolfo Tecchi, de fugaz aparición en el 2023, siguen en silenciosa hibernación. La poderosa topadora histórica del PJ sigue oxidada. Quizá la interna partidaria de la que todos hablan, le recargue combustible y baterías y la nueva conducción acierte el rumbo hacia el 2025.

Primero Jujuy, definitivamente disuelta su sociedad con Cambia Jujuy, se concentró alrededor de la figura del exvicegobernador Carlos Guillermo Haquim, un puñado de legisladores y comisionados municipales, todos peronistas, y conserva bases y militantes en todo el territorio. Para ellos, sin dudas, el 2025 trae un desafío sustancial para su futuro.

La Libertad Avanza también busca un espacio. En el 2023 ganó los senadores Ezequiel Atauche y Vilma Bedia y el diputado nacional Manuel Quintar, desde la formación "Frente Renovador Federal", un mix de peronistas, outsiders, exradicales y muchos miles de bisoños en la política. Pero para el 2025 LLA debe dejar de ser un Frente Electoral para convertirse en Partido Nacional. Para ello ya obtuvo personería de distrito en la Caba, Córdoba, Salta, La Rioja y San Luis, pero "el Jefe" y armadora del partido Karina Milei y el presidente de la Cámara de Diputados, el riojano Martín Menem, miran a Jujuy para continuar tejiendo la red política. Como hasta ahora los referentes locales no dieron señales de organizar LLA como partido, se conoció que desde Buenos Aires iniciaron conversaciones oficiosas con otros contactos locales, algunos marcados desde Salta por el exlegislador peronista Alfredo Olmedo, motor de los libertarios en la provincia vecina.

La izquierda local aferrada al 13% de votos obtenidos por el FIT Unidad, de la mano de Alejandro Vilca, más algunas décimas que aportaron el Movimiento Libres del Sur de José Chocovar y Política Obrera de Iñaki Aldasoro, sueñan seguir vigentes en el 2025, aunque es poco o nada mueven los decibeles en la política local.

Los partidos VIA del periqueño Luciano de Marco, el histórico Movimiento Popular Jujeño, y los sellos que sobreviven con orgullo como el MID, la Democracia Cristiana, entre otros, languidecen frente a la nueva realidad, las nuevas grietas y los nuevos desafíos de la política de los outsiders, los tuiteros, los memes y las redes sociales. Casi desaparecieron. Y pueden desaparecer en el 2025.

El caso es que ya todos, todavía sin romance con la gente, urden telarañas para ganar el año que viene. ¿Demasiado temprano?... puede ser, pero ninguno quiere ser el cocodrilo que se duerme...